Después de muchos años, y ante el anuncio de que David Lynch iba a producir y dirigir nuevos capítulos de la serie, me he puesto a rememorarla, y mi recuerdo de la misma, sin duda, ha mejorado, si esto es posible.

La cuidada ambientación, la preciosidad e inmensidad de esos paisajes montañosos en los aledaños de Canadá, el frío y la humedad del ambiente, esos abetos Douglas que se perfilan en el cielo, ese hotel de madera en un lugar privilegiado con esa preciosa cascada, hasta el aroma del café y los donuts que en España no se comercializaban, sólo los de azúcar y los de chocolate.

Magistral David Lynch en la dirección actoral, incluso obligando a la sobre actuación de muchos de los actores, y la simplicidad de otros, que parece medio lelos o bobos directamente, la belleza de las actrices del reparto, incluso la especial dedicación de Kyle Maclachlan no sólo a la investigación, sino su fijación con el café y las tartas y esa forma de narrar a su grabadora y a la supuesta Diane, todas y cada una de sus vivencias y su día a día, hacen de esta serie una obra de arte al alcance de muy pocas a pesar de su antigüedad.

Y desde luego, el tema principal y la frase que se repitió hasta la saciedad para promocionar la serie, pero que también era la frase de los corrillos tras la emisión de los capítulo ¿Quién mató a Laura Palmer?

Una verdadera y magnífica obra de arte, matrícula de honor. Un merecidísimo 10.

Tom Hanks y Steven Spielberg afrontan su segunda colaboración tras la exitosa "Hermanos de Sangre", esta vez enmarcada en la guerra del Pacífico tras el inesperado ataque y la ignominiosa derrota en Pearl Harbor a manos del Imperio Japonés.

Dejan el relato más documental y realista de la guerra en Europa de "Hermanos de sangre", ofreciéndonos uno más novelado y suave incidiendo más en el propio territorio de EEUU, su propaganda para la adquisición por sus propios ciudadanos de los bonos de guerra para financiar el conflicto armado y su romanticismo barato y glamouroso en comparación con la dureza, el horror, las masacres, la sangre, sudor y lágrimas del teatro europeo.

Grandes y cuidadas acciones bélicas para reseñar las batallas decisivas,en una serie muy recomendable, un punto por debajo de Hermanos de Sangre que es una verdadera obra de arte.

Sobresaliente, 9.

Ridley Scott se propuso darnos a conocer el origen de los aliens, y sus repercusiones en su interrelación con la raza humana, con la siempre intrigante pregunta de ¿de dónde venimos?. Y en esas estamos, tras "Prometheus" nos lanza su secuela "Covenant", y volvemos a la eterna pregunta incontestada, ¿qué fue primero, la gallina o el huevo?.

Seguimos sin respuestas, aunque siempre presumimos, desde la obra de arte que sigue siendo "Alien, el 8º pasajero", que los androides no eran trigo limpio, que además de proteger y servir a la raza humana, había algo más, desde la interpretación genial de Lance Henriksen hasta Michael Fassbender, y que posiblemente la respuesta la tengan precisamente una creación humana de Guy Pearce. Tendremos que esperar a la próxima entrega para resolver el dilema.

La película es de una bella factura, técnicamente muy buena, apoyándose en lo que ya conocíamos de "Prometheus" y dando un paso más, con la manipulación genética del espécimen, con su pulcritud en la redacción, con la espectacularidad de la cacería, con las dosis de intriga y terror casi justas, amparados en ese libro abierto donde puede entrar casi todo cual es la ciencia ficción.

Veo que las críticas no son todo lo buenas que a mí me parecen estas dos entregas. Alien, desde luego, no hay más que uno, el de 1979, hace casi cuarenta años, pero en mi opinión ha envejecido muy bien, y espero con impaciencia esa anunciada última entrega para definir la trilogía.

Mi nota sin duda es un Notable, 8.

Siete episodios ha mantenido la intriga Jean-Marc Vallée para desvelarnos quien es la persona asesinada, quien es el niño que provocaba el acoso escolar y la resolución de las grandes mentirijillas con las que conviven durante la primera temporada las tres protagonistas principales a las que dan vida Reese Witherspoon, Nicole Kidman y Shailene Woodley, a las que hay que sumar Laura Dern y Zöe Kravitz.

Nos deja el regusto a serie importante, donde la sensibilidad, la fuerza y también las debilidades de las mujeres en general, y de este grupo en particular son el alma mater de la serie. Desde la violencia de género, el acoso escolar, el adulterio, la violación, la soledad y los miedos, hasta la elegancia, el glamour, el lujo, la moda, la sensualidad, la belleza femenina, el erotismo, son temas que se analizan en profundidad a través de las vidas de las protagonistas con una narración firme y a la vez elegante, con un profundo estudio del alma femenina realizada por Jean-Marc Vallée, del que desconozco su orientación sexual, pero que francamente ha sacado lo mejor del gran reparto con el que ha contado.

Notable, 8.

El Corazón Púrpura es una condecoración de las Fuerzas Armadas de los Estados Unidos con el perfil del general George Washington, otorgada en nombre del Presidente a aquellos que han resultado heridos o muertos en servicio después del 5 de abril de 1917.

Después del ataque japonés a Pearl Harbor que hizo entrar a EE UU en la Segunda Guerra Mundial, se orquestó una misión para devolver todo el daño posible a Japón en su propio territorio, lo que hicieron a través de un ataque con bombarderos, desatando el terror a la población japonesa que creía que ese ataque era imposible.

Una de esas tripulaciones, que obviamente no podía regresar autónomamente a su base de partida, es hecha prisionera en China, y los japoneses les juzgan como criminales por la muerte, cierta o no, de sus civiles.

Historia de un juicio ficticio con motivos propagandísticos, pues estaba en pleno apogeo la guerra, donde destaca Dana Andrews como el actor más conocido y como director a un reputado autor antibelicista, Lewis Milestone, que dirigió todo un monumento en contra de la guerra en "Sin novedad en el frente" y alguna más, por lo que sorprende su elección para dirigir este film.

Notable, 7.