Haz click aquí para copiar la URL
Críticas de La Taverna del Mastí
<< 1 20 21 22 30 41 >>
Críticas 204
Críticas ordenadas por utilidad
4
19 de junio de 2015
9 de 17 usuarios han encontrado esta crítica útil
Se podría afirmar que dentro del cine negro, más concretamente en aquellas películas que refieren a la mafia italiana, se han filmado grandes largometrajes; incluso algunos de ellos están considerados de los mejores que se han realizado a lo largo y ancho de la historia del séptimo arte. Sirva como ejemplo la impresionante trilogía de "El Padrino" de Francis Ford Coppola o "Uno de los nuestros" de Martin Scorsese. En estos últimos tiempos no se han prodigado demasiado, debido obviamente al cambio de las tendencias en los espectadores; aunque si que se han realizado series de televisión que han abordado el tema de forma realmente brillante. Casos como el de "Roma Criminal" o "Gomorra" son buena prueba de ello.

La película que nos concierne, titulada "Calabria, Mafia del Sur", está enmarcada en el género mafioso, y de entrada, leyendo su premisa (que está basada en la novela "Anime Nere" de Giocchino Criaco, de alto impacto socio-cultural) y viendo la cantidad de premios (como los 9 David de Donatello) y alabanzas, tanto de crítica y público, hacían prever que estábamos ante una de las mejores muestras del género de estos últimos años; sin embargo, nada más lejos de la realidad.

La trama se centra en un pequeño pueblo de la región de Calabria, en el que los hermanos Carbone llevan años viviendo del lucrativo negocio familiar: el tráfico de drogas. Eran hijos de pastores, pero ahora forman parte de la familia criminal calabresa del entorno de la ‘Ndrangheta. Luciano, el mayor, alejado del resto de la familia, intenta mantenerse al margen hasta que su conflictivo hijo Leo empieza a acercarse a su carismático tío Luigi y sus turbios negocios. Cuando Leo pierde el control una noche, los tres hermanos se ven forzados a unirse de nuevo para defender el honor y las vidas de la familia.

El principal problema que ha tenido esta película, así de entrada, ha sido la promoción que se le ha hecho desde España, con ese desafortunado cambio de nombre, ya que cabe decir que su título original no es "Calabria, Mafia del Sur", sino "Anime Nere" (al igual que la novela) que traducido al castellano sería "Almas negras", y que sin lugar a dudas es mucho más apropiado, dada la naturaleza del filme. Ese cambio de título y su premisa sugiere un filme de mafiosos violento, cortado por el mismo patrón que el Padrino o los célebres filmes del género de Scorsese; pero por el contrario, "Calabria" se erige como un profundo y sombrío drama familiar, enmarcado entre dos familias de mafiosos en un pequeño pueblo calabrés, en el que la violencia prácticamente brilla por su ausencia.

Una verdadera lástima porque la cinta cuenta con una ambientación notable, en el que se respira esa tensión desasosegante entre las dos familias enfrentadas, y esos "fantasmas del pasado" que sacan a relucir viejas rencillas y rencores, que hieren profundamente; asimismo, el trabajo de su elenco actoral es también magnífico, destacando por encima del resto el carismático Marco Leonardi. Pero su lento y (porqué no decirlo) cansino ritmo ralentiza en demasía el metraje, convirtiéndolo en un filme bastante farragoso y plomizo. Lo dicho, una lástima.

En definitiva, a pesar de todas esas grandes críticas y esa compilación de premios obtenidos, "Calabria" es una película, a todos los efectos, decepcionante, debido a que no da lo que promete. Es posible que la culpa de que no me haya gustado la tenga Coppola o Scorsese, por "mal-acostumbrarnos" a esas violentas y vigorosas cintas de mafiosos, en el que mataban hasta al apuntador, y de diversas formas (incluso hasta de forma poética); pero... en fin! ¿Qué se le va a hacer?
La Taverna del Mastí
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
5
28 de mayo de 2014
3 de 5 usuarios han encontrado esta crítica útil
En el año 2000, el director y guionista francés Luc Besson, fundó la compañía "Europacorp" bajo el pretexto de producir y distribuir películas a nivel internacional. Con historias creadas y escritas por él mismo, suele contratar a un director, generalmente novel, para que dirija el filme en cuestión.

Para esta película que nos abarca, "3 Días para matar" ("Three Days to Kill" en su título original en inglés), Besson ha contado con los servicios de McG, un realizador estadounidense bastante interesante que no ha tenido excesiva suerte, tras haberse hecho cargo tiempo atrás, concretamente en 2009, de "Terminator Salvation", la cuarta entrega de la saga de ciencia ficción (iniciada por James Cameron); pese a que era una buena película, y huelga decir que fue superior a la decepcionante tercera parte.

Se puede afirmar que, en cierto modo, Besson rescata a McG para que lleve a cabo "3 días para matar". Se trata de un híbrido entre el cine de acción, con el corte de drama familiar, y pinceladas de humor negro; que a pesar de estar repleto de frases lapidarias y tópicos del género, está bien resuelto y es muy entretenido. Además cuenta con Kevin Costner, que sin realizar una gran interpretación, aporta grandes dosis de carisma y aplomo al personaje; algo parecido a Liam Neeson cuando se sumerge en películas de acción (sirva como ejemplo "Venganza" o "Sin Identidad").

La historia se centra en Ethan Runner (Kevin Costner), un agente del servicio secreto retirado, debido a una enfermedad terminal, que se ve obligado a realizar una última misión a cambio de probar un fármaco experimental que podría salvarle la vida, al mismo tiempo que intenta recuperar a su hija adolescente y su ex-mujer.

Me ha encantado el inicio, siendo una de las mejores secuencias de acción del filme; al igual que aquella, la cual Costner montado en una bicicleta, secuestra a un tipo entre dos coches y un autobús, bajo la atenta mirada de un niño. A su vez, los gags humorísticos son bastante divertidos y hacen que la película sea fluida y para nada pesada (genial cuando cierto italiano amordazado da una receta de su "mia mamma" por teléfono, a punta de pistola).

Por contra se le puede achacar un guión flojo, a cargo de Luc Besson, que recuerda a anteriores filmes también escritos por él, tales como: "El profesional (León)", "Transporter", o "Wasabi: el trato sucio de la mafia"; aunque son bastante mejores que esta que nos concierne.

En definitiva, "3 Días para matar" no es ninguna maravilla de película, pero contiene grandes dosis de entretenimiento; buenas y truculentas secuencias de acción con persecuciones, tiroteos y mamporros a la par; y un actor con mucha personalidad y oficio.
La Taverna del Mastí
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
7
29 de septiembre de 2017
2 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
Hablar de "It" es hacerlo sobre una de las novelas más ambiciosas de Stephen King, debido principalmente a su extensión editorial de más de 1000 páginas y la particular manera con la que logró perfeccionar las claves del género de terror, abordando los miedos más insondables de la psique humana por lo cotidiano. Es justamente esa urdimbre de terror sobrenatural y ordinario uno de los grandes aciertos de un escritor entrañable como pocos. Por otro lado, adaptar una novela tan extensa es una ardua tarea. Conocida por todos es la miniserie televisiva con la que Tommy Lee Wallace aterrorizó a toda la generación de los noventa, que a pesar de contar con la inolvidable y terrorífica encarnación de Tim Curry bajo la piel del payaso Pennywise, vista hoy en día ha envejecido bastante mal, tanto por su desfasada factura técnica como por ese tono amable que difiere bastante con la perversión reinante en la novela. Así que, con estos argumentos, se podría afirmar que era necesaria una adaptación cinematográfica que, en líneas generales, estuviera a la altura de las circunstancias; y esta nueva versión lo consigue en gran medida.

Siete años de preparación ha tenido este ambicioso proyecto, en el cual han pasado diversos guionistas y directores que han ido aportando su granito de arena a lo que finalmente hemos podido disfrutar en las grandes pantallas. Como por ejemplo los hermanos Matt y Ross Duffer, que tras no pasar el corte se fueron a Netflix y realizaron la estupenda serie "Stranger Things" (un velado homenaje a los 80, a Stephen King y a 'It' en particular). También Cary Joji Fukunaga, que presentó un guión a la misma altura de depravación que derrocha la novela original; pero por desavenencias con la productora acabó dejando el testigo al argentino Andy Muschietti, el cual confiesa que leyó la novela de joven y hace muchos años que la lleva en su interior; también que su primer contacto fue con el guión de Fukunaga, así que cuando surgió la oportunidad de hacer la película, lo primero que pensó fue en recurrir a su experiencia personal cuando leyó el libro con 14 años, y luego trasladarlo a la película que le hubiera gustado ver en aquella época como adulto. Bajo esta premisa, y teniendo en cuenta que a cada uno le pega un libro de manera distinta y personal, era más que obvio que esta nueva adaptación iba a sufrir considerables cambios.

El más significativo es el distinto periodo temporal y la estructura narrativa del mismo. Cabe recordar que en el vasto texto de King se relataba dos líneas argumentales entrelazadas, una protagonizada por los niños del 'Club de los perdedores' y la otra situada 27 años después. Muschietti y los guionistas del filme, han otorgado todo el protagonismo a los chavales, dejando para la segunda parte la trama de los adultos. Este cambio estructural elimina los numerosos flashbacks que ofrecía el primer episodio de la miniserie, dándole dinamismo y ritmo a la historia. Con respecto al cambio temporal han sustituido los años cincuenta por los 80, permitiendo que el espectador actual empatice con los personajes; sobre todo un deslenguado Riche Tozier que se encarga con sus frases sarcásticas de dar un respiro al espectador en momentos puntuales, al igual que una Beberly March que se erigie como la principal protagonista.

Esto hace que los monstruos que aterrorizan también cambien, pasando del hombre lobo, la momia y el monstruo de "La mujer del lago"... a los padres quemados de Mike y la escalofriante mujer pintada de Stan. De igual modo, la muerte inicial de Georgie a manos de Pennywise, así como la escena del baño de Bev han sido considerablemente mejoradas. Aunque la principal virtud de esta nueva adaptación no es la inquietante encarnación de Bill Skarsgård como el payaso Pennywise; ni los acertados nuevos monstruos antes citados, junto con el rescate del leproso; ni el cambio temporal a los nostálgicos años ochenta... sino más bien se debe a aquello que tan bien se le da a Stephen King, aquello que citaba al principio de la reseña, ese discurso sobre la cultura del miedo a lo cotidiano. Ya que los verdaderos monstruos son aquellos que habitan entre nosotros, aquellos con la piel de cordero, que te dan la 'palmadita' en la espalda y fingen preocuparse por tu estado. Me estoy refiriendo a aquella madre que para proteger a su hijo lo droga diariamente administrándole placebos; también a ese padre lascivo y posesivo que abusa física y sexualmente de su hija amparándose en su verdadero amor de niña; aquel que con su educación severa y subyugante lleva a su hijo a la psicopatía total; o el individuo que confunde el 'hacerse un hombre' con la violencia que conlleva apretar el gatillo del perno animal... Son monstruos instaurados en una comunidad en la inopia más absoluta, que con sus actos permiten que se desvanezca la fraternidad y destruyen cualquier atisbo de futuro. Ahí es donde radica la verdadera virtud del filme.

He de confesar que la he visto dos veces. La primera vez me dejó bastante frío. Estaba casi convencido de que había visto un filme completamente infantil, que aunque había subido el grado de gore y escatología, se acercaba a aquellos arquetipos y sustos baratos a los que se refería Fukunaga; sin embargo, en la segunda vez vi otra lectura, la que corresponde a las líneas que estás leyendo, y el auténtico miedo esencial del filme se me metió en el interior, aquel que se encuentra oculto en cada fotograma en movimiento, como esas diapositivas que ven los integrantes del 'Club' y que tras dispararse solas, muestran finalmente el horror en su estado más puro.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
La Taverna del Mastí
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
7
9 de agosto de 2017
2 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
Las películas de superhéroes protagonizadas por una mujer no se han prodigado demasiado en la historia del celuloide, y mucho menos han gozado de éxito, hasta la llegada de "Wonder Woman". No obstante, ante de entrar de lleno en la valoración propiamente dicha de la mujer maravilla, me gustaría echar la vista atrás en el tiempo para enumerar las distintas películas previas de superheroínas, para poder entender la importancia que ha supuesto la película de Patty Jenkins en el panorama cinematográfico.

La primera superheroína la pudimos ver en la esperpéntica cinta mexicana "La mujer murciélago (Bat-Woman)" (Id., René Cardona, 1968), que protagonizó a finales de los años sesenta la actriz italiana Maura Monti; la infantiloide "Supergirl" (Id., Jeannot Szwarc, 1984) que no pudo salvarla del fracaso más absoluto ni el entusiasmo que puso su protagonista Helen Slater; "Sheena, reina de la selva" (Sheena, John Guillermin, 1984) que a pesar de estar basaba en el primer cómic publicado protagonizado por una mujer, y contar con la presencia de la exuberante Tanya Roberts (que en 1985 se convertiría en 'Chica Bond' en "Panorama para matar"), no cumplió en absoluto con las expectativas; la excéntrica antiheroína "Tank girl" (Id., Rachel Talalay, 1995) protagonizada por Lori Petty y que supuso uno de los grandes descalabros económicos de la década; la desastrosa "Catwoman" (Id., Pitof, 2004), que contó con una Halle Berry fuera de lugar, y la cual no se mordería la lengua a la hora de tildar el filme como un "pedazo de mierda" mientras recogía el Razzie a la Peor Actriz en el año 2005; o "Elektra" (Id., Rob Bowman, 2005), que partiendo de la base de que el personaje, interpretado por Jennifer Gardner, ni siquiera brillaba tanto en "Daredevil" (Id., Mark Steven Johnson, 2003) como para merecer una película en solitario, la cinta encabezó uno de los mayores fracasos de Marvel.

Tras este obligado inciso, es pertinente decir que la citada escasez de personajes femeninos en los filmes de superhéroes ya fue denunciada por Joss Wheedon hace tres años, tras haber sido precisamente éste el encargado de dirigir una película que amasó enormes recaudaciones contando con una chica entre sus personajes principales. Es el caso de "Los Vengadores" y de la 'Viuda Negra' interpretada por Scarlett Johansson que, sin embargo, formaba parte de un equipo mucho mayor (compuesto casi íntegramente por hombres), y ni siquiera ha llegado a contar con una película propia como sus compañeros 'marvelitas'.

Así que con semejantes precedentes y con el machismo imperante en la industria cinematográfica, "Wonder Woman" ha llegado para dar un auténtico mazazo sobre la mesa y poner el panorama patas arriba. Por fin una superheroína protagonista genuinamente femenina (y no una versión masculinizada del rol) que cuenta con identidad y valores propios, ha irrumpido con fuerza, rindiendo a crítica y público en un filme asombroso, que mira a los ojos a cualquier película exitosa de superhéroes masculinos, tanto da si son de DC, Marvel u otras viñetas de distinta índole.

No cabe duda que Wonder Woman se erige como el arquetipo perfecto del empoderamiento de la mujer, contradiciendo a todos aquellos que aseguraban que las películas protagonizadas y/o dirigidas por mujeres no interesan al gran público. Así que la historia de la princesa guerrera que decide luchar contra aquellos hombres que solo quieren ver el mundo arder no podía llegar en mejor momento, y en los próximos años podremos disfrutar en las carteleras de películas con superheroínas como protagonista, como "Capitana Marvel" (Captain Marvel, Anna Boden y Ryan Fleck), cuyo nombre real es Carol Danvers, una poderosa 'capitana' que puede volar y disparar rayos de energía con sus manos, y que será encarnada por la 'oscarizada' Brie Larsson; también de "Gotham City Sirens" (Id., David Ayer) centrada en Harley Quinn (lo más destacable de "Escuadrón suicida"), en una película que puede contar con la presencia de las Aves de presa (Birds of prey); de igual modo que una de la Avispa que compartirá protagonismo con 'Ant-Man', en "Ant-Man y la Avispa" (Ant-Man and The Wasp, Peyton Reed) con su estreno en carteleras previsto para el próximo año 2018.

Entrando ya en la valoración de la película, decir que el arranque del filme es maravilloso, en el que vemos crecer a Diana (antes de ser Wonder Woman) en las islas protegidas de las Amazonas, entrenada desde niña para ser una guerrera invencible. Hasta que un día un piloto norteamericano tiene un accidente en las costas amazónicas, y le habla de un gran conflicto existente en el mundo, la Primera Guerra Mundial. Así que Diana decide salir de la isla convencida de que puede detener la terrible amenaza, luchando junto a los hombres en la guerra que acabará con todas las guerras, y descubriendo de paso todos sus poderes y su verdadero destino.

La factura técnica es sencillamente brillante, con unas escenas de acción espectaculares (tanto en las clásicas trincheras de la gran contienda como en la batalla final). Se puede destacar también la genial banda sonora de Rupert Gregson-Williams. Aunque por encima de todo se encuentra una impresionante Gal Gadot, que encarna a la perfección a la épica guerrera. Compasiva, serena e ingenua a partes iguales, y que posee una fuerza y dotes para la lucha descomunales. Ella es Wonder Woman, el 'alma mater' de la cinta que nos ocupa y la gran responsable de que la película haya sido todo un éxito.

A pesar del desafortunado cambio en el origen del personaje* (ver en la sección spoiler), "Wonder Woman" es una película de superhéroes notable (y viendo como está el panorama, hasta se podría decir que necesaria) que marca un importante punto de inflexión en el género, y crea grandes expectativas de cara al próximo estreno de la 'Liga de la Justicia' del DC Extended Universe.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
La Taverna del Mastí
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
7
24 de julio de 2017
2 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
La trilogía de César cierra el círculo... el mismo que dio comienzo hace unos años con el asombroso reinicio de una de las cumbres de la ciencia ficción, tanto en cine como en la literatura, como es el clásico protagonizado por Charlton Heston en 1968 y la impresionante novela distópica de Pierre Boulle respectivamente. Aquella nueva trilogía iniciada en 2011 se centró en contarnos el origen de la historia, ofreciendo un punto de vista novedoso a una franquicia que cuenta con numerosas secuelas, series de televisión varias y hasta un descafeinado remake a cargo de Tim Burton. Recapitulemos pues... todo empezó con aquel experimento para tratar el alzheimer que provocó el desarrollo de las capacidades cognitivas de los primates, al mismo tiempo que el retrovirus de la gripe simia convirtiera a los humanos afectados en seres erráticos y sin habla. Tiempo después, con el planeta devastado y la humanidad prácticamente desvanecida, ambas civilizaciones se enfrentaron entre si por la supervivencia de la especie dominante. Y ahora, tras estar años sumidos en encarnizados enfrentamientos, nos meten de lleno en la guerra entre simios y humanos... una guerra entiéndase a diferentes niveles, mostrando tanto el campo de batalla como ahondando en la moralidad de ambos bandos, así como en la deshumanización del individuo, predominando un tono entre el western crepuscular, las historias de fugas carcelarias y el cine bélico.

Se podría decir que Matt Reeves es un verdadero artesano. Antiguo socio de J. J. Abrams en series como "Felicity" (1998 - 2002) y en películas como "Monstruoso" (Cloverfield, 2008), así como responsable del estimable remake de "Déjame entrar" (Let Me In, 2010)... cabe decir que con la sobriedad que le caracteriza, ha sido capaz de otorgarle alma y profundidad a una historia que a priori podría instaurarse en el ridículo, tal y como ya hiciera en la segunda entrega con el hecho de mostrar a los simios montando a caballo. De por si, ésto ya es un logro importante. Caso aparte es el impresionante trabajo de Weta Digital con el tema de la captura de movimiento, que en esta nueva trilogía sustituyera al maquillaje imperante en los clásicos. Y más concretamente, destacar el trabajo de un profesional como Andy Serkis, que ha demostrado que además de ser todo un especialista en éste campo también es un excelente actor. Suyas son las creaciones de personajes tan maravillosos y ambiguos como el Gollum de "El Señor de los anillos", el Captain Haddock del "Tintín..." de Spielberg o como este César de la trilogía simiesca. Una caracterización que va mucho más allá de los efectos especiales, ya que Serkis ha creado un personaje con alma propia, dotándolo de sensibilidad y valores. Acosado por los fantasmas del pasado y el dolor infundido por la pérdida de sus seres queridos, en "La guerra del planeta de los simios" vemos a un César cegado por la ira, pero también a un ser abatido y con el anhelo de descansar de una vez por todas, de terminar con el sufrimiento y vivir en paz con su pueblo. Huelga decir que con el notorio trabajo de Serkis es muy fácil identificarse en los conflictos morales de César, siendo uno de los puntos fuertes de la propuesta que nos ocupa.

Por otro lado, el coronel encarnado por Woody Harrelson se convierte en el contrapunto perfecto de César. Un señor de la guerra megalómano y sin compasión que es capaz de cualquier cosa por ganar la contienda. Personalmente, me ha recordado en muchos momentos al coronel Kurtz interpretado por Marlon Brando en la monumental "Apocalypse Now" (Id., Francis Ford Coppola, 1979) —solo basta con ver la primera aparición de éste en las cuevas con la cara pintada casi al completo de negro—. Su fanatismo ideológico hace que someta a los simios a través de la violencia y el miedo en un improvisado campo de concentración; del mismo modo que ya hicieran otros en conflagraciones pasadas, como por ejemplo los nazis a los judíos en la segunda guerra mundial.

Destaca también, como en las anteriores entregas, su factura técnica, compuesta por unos rutilantes efectos visuales y una banda sonora a cargo de Michael Giacchino, que sin ser brillante, adereza de maravilla al broche final de una serie ejemplar (sobresaliendo en una época trazada por la proliferación de remakes, reboots, precuelas y spin-offs de toda índole). En resumidas cuentas, un fantástico filme que disuelve los desvaríos del ser humano entre agua, fuego y nieve, tres elementos de una naturaleza desprovista de su esencia.
La Taverna del Mastí
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
<< 1 20 21 22 30 41 >>
Más sobre La Taverna del Mastí
Cancelar
Limpiar
Aplicar
  • Filters & Sorts
    You can change filter options and sorts from here
    arrow