¿De verdad esta película es "el retorno del mejor Woody Allen"? ¿¿"Su mejor película en muchos años"?? ¿¿¿"Original, divertidísima"???

Pues a mí me ha parecido de lo más flojito que ha hecho nunca el bueno de Woody... vamos, que a su lado, me está empezando a parecer medio buena "Vicky, Cristina, Barcelona"...

La historia es simpática, pero tampoco es que sea el colmo de la originalidad... la estupidez de la novia y del amigo pedante de ella están llevadas al extremo, y a la segunda aparición dejan de tener gracia. Owen Wilson sí creo que cumple bastante bien, aunque al fin y al cabo... es el mismo personaje que una y otra vez aparece en las películas de Allen.

Y poco más... una fotografía bonita, buena música, un par de actrices preciosas y una película que al día siguiente está olvidada.

(Esta noche me pondré 'Annie Hall', para reconciliarme con el mundo...)

No sabría explicar los motivos por los que considero que ésta es la mejor película hecha jamás en España.

No me atrevo a hablar de metáforas (mi mente es demasiado simple para pillarlas), ni de pequeños detalles inapreciables (se me escapan, lo siento). No sé apreciar cuándo un plano es bueno, o cuando un guión es sólido. A mí me va más la acción, la aventura, lo obvio, no lo sutil ni lo contemplativo.

Sólo sé que las 3 veces que he visto esta película, he terminado en un estado próximo a la levitación. Que nunca he visto, como en esta película, acercarse tanto y de manera tan acertada al complejo mundo de los niños, lleno de misterios y secretos (y al de los adultos, lleno de mentiras e imposturas).

Que es una obra de arte, vamos.

La (a veces) maravillosa filmoteca de Andalucía me ha permitido ver en pocos meses las dos peores películas que he visto en muchos años: 'Batalla en el cielo', de Carlos Reygadas, y 'Tiro en la cabeza', de Jaime Rosales, soporíferas, pretenciosas, bobas y feas a más no poder.

Vayamos con esta última.

Pienso que es una tomadura de pelo. Si uno tiene la intención de rodar una película sin guión, sin diálogos, sin actores y sin sentido, al menos que no se tome demasiado en serio a sí mismo y ruede, no sé, 'Karate a muerte en Torremolinos' o 'Plan 9 frome outer space', películas cuyos defectos y carencias se convierten en virtudes debido a su actitud ligera y alegre. Pero si intentas ser Ozu o Dreyer, y ni tu talento ni tus medios te lo permiten, te conviertes en Jaime Rosales, el mayor farsante que haya conocido el cine español (lo que ya es decir...).

Por otro lado, si no fuera suficiente con el pésimo contenido formal, el ¿mensaje? es bastante dudoso... Está bien que se nos recuerde que los asesinos también son personas; pero pienso que eso ya lo sabemos, y que sería más necesario recordar a algunos que quienes también son seres humanos son las víctimas, tantas veces olvidadas y menospreciadas por esa progresía reaccionaria y sectaria que nos gobierna.


'Las horas del día' era una película diferente, interesante y a tener en cuenta. Con 'La soledad' ya empezamos a olernos algo raro. Y ahora con este 'Tiro en la cabeza' lo hemos confirmado... Rosales es el director más tonto, torpe, pretencioso y ridículo que hemos visto en mucho tiempo.

No tenía ni idea de la existencia de esta película hasta hace una semana... estaba en casa revisando una serie de películas piratas que vende un amigo mío cuando de repente vi el nombre de George A. Romero en una carátula... lo primero que pensé es que habían utilizado su nombre para atraer al espectador, o que la producía, o que estaba basada en alguna idea suya...

Pero no, meto el dvd en mi ordenador y sí, parece que pone "Directed by George A. Romero". Un escalofrío recorrió mi cuerpo.

El creador de la seminal (pero, a mi juicio, algo envejecida) "La noche de los muertos vivientes". De la genial y terrorífica "Zombie". De la divertida y enloquecida (y sí, también genial) "El día de los muertos" y de la magnífica "La tierra de los muertos vivientes" había vuelto de nuevo al género por el que siempre será recordado.

Pero nada, empieza la película y ya empiezo a oler algo raro... los actores no convencen. La historia pretende ser una crítica a los medios de comunicación, o a no sé muy bien qué, pero no consigue su objetivo. El final es absurdo. ¡Ni siquiera hay demasiada sangre, ni cabezas cortadas, ni tripas desparramadas!

¿Qué nos ofrece esta película, pues? Poca cosa: un entretenimiento aceptable, pero que si no viniera firmada por quien ha conseguido estar en lo más alto, no merecería demasiada atención.

En fin, recomendable sólo para los que disfrutamos con el género zombi, pero un lastimoso cierre para una saga que, en sus 4 entregas anteriores había conseguido unas cotas altísimas de calidad, es decir: diversión y reflexión.

Romero, nos debes una...