La película es tan estúpida como su nombre indica, pero sin embargo no deja ser un chiste que a pesar de que le falta gracia, te saca una sonrisa.

Evaluar un producto como este con cualquier estándar fílmico que se quiera es imposible: fallaría en todo. Fallos de raccord atroces, actuaciones horripilantes, efectos que dan risa, y una fotografía correcta a ratos.

¿Se puede decir entonces eso de "tan mala que es buena"? Sí y no. El chiste puede llegar a hacerse repetitivo en algunos momentos, aunque siempre se realza con alguna que otra genialidad absurda.

Es por ello que no se debería ni considerar como cine trash, o hasta podríamos decir que es una mala parodia del cine trash...lo cual es hasta preocupante.

Eso sí, debe verse con un(os) amigo(s) porque sino hay riesgo de derrama cerebral.