Pensar que esta película sería más divertida que Vengadores podría parecer una locura, pero como bien apuntaban los trailers, Guardians of the Galaxy es diversión y entretenimiento en estado puro.

Sí, es humor burlón, pero es totalmente autoconsciente y eso no quita que después tengamos una historia construida con cierta coherencia (que tiene sus incongruencias, pero son pocas) y un desarrollo de personajes al menos estudiado y pensado. Y tan bien interpretado que hasta Dave Batista parece un actor de verdad (y por cierto, genialmente elegido para el papel).

GotG también es todo una carta de amor a la space opera. Hacía tiempo que no veía un universo galáctico tan bellamente construido, incluso cuando quiere ser sucio e industrial puedes encontrar belleza en el uso del color y las formas (esa cabeza gigante/base espacial). Es la evidencia de un trabajo de fotografía impecable.

Quizás está más coja en lo que a montaje y realización de acción se refiere, ya que en algunos momentos se hace difícil de ver, pero su incansable ritmo es otra de sus mejores cualidades.

No debemos olvidar la fantástica banda sonora usando canciones pop de los ochenta y setenta. Jamás creía que algo así podía quedar tan bien en una aventura espacial.

GotG es una de esas películas que te deja con ganas de mas, una especie de Mentiras Arriesgadas de la era digital y otro ejemplo de cómo se deben hacer los blockbusters.