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España España · badajoz
Voto de deivi:
8
Drama Walt Kowalski (Clint Eastwood), un veterano de la guerra de Corea (1950-1953), es un obrero jubilado del sector del automóvil que ha enviudado recientemente. Su máxima pasión es cuidar de su más preciado tesoro: un coche Gran Torino de 1972. Es un hombre inflexible y cascarrabias, al que le cuesta trabajo asimilar los cambios que se producen a su alrededor, especialmente la llegada de multitud de inmigrantes asiáticos a su barrio. Sin ... [+]
25 de diciembre de 2008
68 de 80 usuarios han encontrado esta crítica útil
Eastwood se fabrica en Gran Torino un papel a medida, una exacta replica de lo que su admirado/entregado fan quiere ver, todo un touchdown en cuerpo y alma, un golpe ganador de un rey imbatible.

Sorprende en su noble y desnuda mirada el vehículo elegido para su retirada interpretativa, una despedida triunfal que le ennoblece, una historia sencilla, despegada de excesos, cotidiana y mordazmente cautivadora. Gran Torino puede y debe verse como un film modélico, un copioso manjar para paladares selectos, una película que guarda en su sereno y adulto mensaje un bello relato de amistad, dolor, fe, redención, recuerdos y sentimientos, un alegato perspicaz contra el racismo y la difícil cohabitación entre culturas, otra (y van…) demostración de sabiduría de un viejo zorro que hoy por hoy se vuelve a posicionar como el último cineasta clásico en vida, algo que no le priva de seguir evolucionando en cada nuevo sacrificio cinematográfico, avanzando velozmente en su particular escala de valores, unas manos de artista que moldean una creación del todo milagrosa.

Clint Eastwood, en su genial encarnación de veterano de guerra gruñón y atormentado, divisa sentado desde su porche un vecindario multirracial, violento y desdibujado, con la amenaza constante de bandas callejeras y la desaparición de principios y valores, una sociedad muy bien radiografiada por el objetivo limpio de un director enfurecido con el mundo, una furia que se refleja sentida en la relación maestro/aprendiz del protagonista con el tímido Thao, un chico oriental que albergará esperanzas en el dolorido corazón de un hombre angustiado, un Kowalski que emprende su viaje final en solitario, sin el apoyo ni el cariño de una familia aterradora o el perdón definitivo de sus pecados en batalla.

El realizador de Sin perdón presenta insuperable doblete (El intercambio y Gran Torino) en su posible y merecida presencia en los próximos Oscar, unas candidaturas que podrían premiar por fin su intachable trabajo como actor, Gran Torino es su llave a la puerta del definitivo reconocimiento.

LO MEJOR: La cada vez más interesante faceta del Eastwood compositor, aquí atreviéndose incluso a cantar en la hermosa canción final. Todos los actores asiáticos, en especial los dos jóvenes hermanos. La fotografía de Tom Stern (virtuoso iluminador del maestro en sus siete últimas películas) y su falta de pretensiones.

LO PEOR: Falta desarrollo en algún que otro personaje secundario y huele (esta vez sí) a retirada definitiva de Clint frente a las cámaras.
deivi
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