Película canadiense que nos plantea una situación que en mayor o menor medida hemos vivido todos alguna vez en nuestra vida. El hecho de tener un buen amigo a tu lado, y enamorarte. Esos miedos y dudas que surgen al querer algo más con esa persona, pero saber que puede tener las consecuencias de perder la amistad.
Se trata de una comedia fresca pero con un guión bastante interesante. Cuenta con escenas que están muy bien tratadas, y con diálogos que plantean ciertas reflexiones.
Los personajes están en ese punto que han dejado la adolescencia y empiezan a sentir las primeras presiones del madurez, haciendo que los planteamientos de su vida sean diferentes a los que se imaginaban. Unos jóvenes que tienen otras preocupaciones e inquietudes, pero que son jóvenes y buscan esa relación idílica. Y ¿con quién mejor que con su mejor amigo?
Daniel Radcliffe abandona su capa de Harry Potter y se pone en la piel de este joven que ha sufrido un fuerte desamor, y que solo sueña con que su mejor amiga sienta algo más que una amistad por él. Un joven tímido e introvertido que hace malabarismos para controlar sus sentimientos, y así no perder la amistad con esa chica.
Su interpretación es buena, y su personaje está lleno de matices. Cosa que le ocurre también al trabajo de su compañera Zoe Kazan. Ella da vida a esa joven que tiene una relación con un chico y que lucha porque siga a flote, aun sabiendo que algo no va del todo bien. También comprende que algo está surgiendo entre su mejor amigo y ella, pero el terror a dejar su relación por comenzar otra nueva hace que no abra los ojos.
Ambos actores nos regalan escenas muy buenas gracias a un guión que cuenta con ciertos giros dramáticos que sorprenden. Es un guión que no resulta lineal, y uno descubre que es una comedia fresca que encandila, y con la que uno vive unos grandes momentos gracias a unos diálogos interesantes.
En fin, se trata de una película que sorprende y que entretiene desde el principio. Uno se engancha a esa lucha interna que tiene cada personaje (cada uno a su modo) para intentar controlar sus sentimientos, y que no se pierda una relación perfecta. Porque, ¿quién tiene el valor para arriesgarse a perder una relación de pura y ciega de amistad, por una supuesta buena relación de amor?