He visto numerosas veces esta película y nunca me ha decepcionado. Desde la primera vez que la vi su historia me atrapó y me sedujo; y reconozco que es una de mis películas favoritas.
Luc Besson hizo en 1994 uno de los films mas importantes del cine francés ofreciendo una historia en la que un asesino implacable debe hacerse cargo de una niña que se ha quedado sola en el mundo. La relación entre ambos será especial, y tendrán que vivir situaciones límites rodeados siempre por la muerte y la venganza, pero acompañados en todo momento de una planta.
Jean Reno da vida de manera magistral a este asesino. Un hombre frío a la hora de matar, pero que luego en su vida privada es una persona muy noble. Una persona que no sabe leer, que solo bebe leche, que no quiere hechar raíces y que es todo bondad.
Junto a él un impresionante Gary Oldman que da vida a un personaje totalmente odioso. Un hombre que es la corrupción personificada y que no duda en apretar el gatillo delante de cualquier individuo; ya sea un asesino, un anciano o un niño pequeño.
Pero sin lugar a dudas en lo que actoralmente se refiere, a esta película hay que agradecer el descubrimiento de Natalie Portman. Era una niña cuando hizo esta película, pero ya demuestra el enorme talento que tiene. Su interpretación es fantástica y emociona en todo momento, regalándonos un personaje que ya ha quedado en la memoria de todo el mundo que ha visto esta película.
Es un film increíble que recuerda mucho al estilo de Tarantino, aunque salvando las distancias lógicas de todo el tema sanguinario. Pero la manera de narrar la historia y la estética hace que uno le venga a la mente el tipo de cine de este brillante director.
En fin, "El profesional (León)" es una de las mejores películas que he visto. Un film que te atrapa desde el minuto uno hasta el final de tal manera que no te suelta en ninguna escena. Es única la relación que viven estos dos personajes protagonistas, y en pocos films nos encontramos con un villano de tal calibre que no le importa matar a cualquier tipo de persona. Una película con escenas brillantes y emotivas que se quedarán grabadas en la retina para siempre.