Tomamos el conflicto de Oriente Medio visto desde el punto de vista humorístico, y le añadimos una dosis (bastante elevada por cierto) de humor un poco soez, y tenemos la película objeto de ésta crítica. Trata sobre las desventuras de un agente secreto israelí (al que por cierto conoce todo el mundo) que descubre que su nueva vocación es...ser peluquero. Trata de poner un toque de humor al conflicto palestino-israelí, y aunque sea por momentos bastante soez, tiene algunos golpes de sátira política muy aguda. Destacar la gran actuación de John Turturro como antagonista de nuestro particular peluquero. Los que sean de risa fácil tendrán muchos momentos para hacerlo en la película, aunque algunos gags "picantes" estén bastante manidos. Los más exigentes... también tendrán sus ratitos de esparcimiento.