Es algo así como un resumen de lo peor de la cultura pop y una oda al consumismo. Una especie de reunión de marcas que se hacen amigas para intentar venderte un producto que huele mal a la legua.

Pero una cosa os voy a decir: la película no es tan horrible. Vale, no es una película que puedas disfrutar como pasa con la mayoría de Pixar y está más destinada a un público de unos 8-14 años, pero teniendo eso en mente he visto muchas cosas peores.

A posteriori es evidente que a la Emoji película no le ha ido demasiado bien, pero a priori, el caldo de cultivo para transformar esto en el producto de merchandising definitivo era irresistible. Os lo digo en serio, la película suena muy estúpida, pero a mí me viene un director con esta idea y visualizo un mundo lleno de peluches, tazas, mantas, videojuegos y hasta papel del water repleto de emojis. En el fondo ya existen todo ese tipo de cosas con los emojis, pero esta Emoji película bien podría haber servido para unificar de alguna manera todos esos esfuerzos y sacar productos "oficiales".

Animación muy estándar, de esa que te puedes casi encontrar en cualquier capítulo de una serie de animación con presupuesto. Historia estúpida pero de alguna manera pensada. Todo termina en el clásico número donde todos los personajes bailan, lo cual siempre es indicativo de que la película es malísima.

Si tuviera que ponerle un emoji a esta película supongo que sería uno sin expresividad alguna, pero no llegaría a ponerle la mierda que muchos le pondrían.