No llega a ser tan divertida (no sé si divertida es exactamente la palabra que busco) como lo fue el libro en su(s) día(s) pero no ha sido tan horrible como esperaba. Si has leído el libro, en el cual hay folleteo en dos de cada tres páginas, seguramente esperabas que hubiese más escenas de cama. Sin embargo, han sabido "medio camuflarlo" para que no se note tanto la falta de escenas sexuales, eso sí, el pasteleo quinceañero entre ellos dos te lo comes descaradamente. Dakota Johnson ha sabido meterse bastante bien en la piel de la virginal Anastasia Steel, esa especie de copia barata de la Bella Swan que protagonizaba la saga Crepúsculo. Jamie Dornan, para mi gusto, no lo hace tan mal como ya he leído en otras críticas. El personaje de Christian Grey es frío y seco para sus muertos, no se le puede pedir más donde no hay. En general la película es bastante mediocre y en comparación con el libro se queda pobre, pero sabía que misteriosamente me iba a gustar desde el momento que vi el trailer. No pasa de ser eso, la nueva Crepúsculo de serie B (y por serie B entiéndase cutre, no barata, porque un presupuesto de cuarenta millones de dólares me parece de todo menos barato), con menos vampiros, más fustas y el mismo número de coches caros, todo ello adornado con un remix de la canción más vieja de Beyoncé. Quizá después de todo sea la banda sonora lo que medio salva a esta película. No se puede decir tampoco que tenga una fotografía espectacular ni nada por el estilo. Quitando los planos del helicóptero y el avión sin motor o como puñetas se llame, la película no pasa del plano contraplano y algún que otro contraluz llamativo que hace que momentáneamente dejes de prestar atención al guión, no vaya a ser que te des cuenta del bodrio que estás viendo.

En resumen: No, no es muy buena y aún siendo consciente de esto, sí me ha gustado, pero no animo a nadie a gastarse su dinero en ir a verla. No da ni para paja.

P.D. (¿Dónde han dejado la escena en la que Anastasia se lo traga? Vaya chasco)