Fui al cine con más miedo que otra cosa. La película de los Vengadores está ya en rodaje, y sólo uno de sus miembros (Ironman), había dado la talla -con creces-. Thor me pareció un bodrio espectacular, y sólo he visto la primera película de Hulk, la de Eric Bana. Llegué al cine intentando dejar la mente en blanco, dándole al Capitán América un voto de confianza, el beneficio de la duda: no esperar nada tan genial como Ironman, ni el tostón de sus otros dos compañeros.

El resultado: bueno en líneas generales. Película muy entretenida, sin grandes entresijos pero con un personaje de cierto trasfondo.

Esperaré The Avengers con ilusión, confiando en Marvel haya encontrado por fin el camino de la gran pantalla para sus personajes.

Recomendable