Haz click aquí para copiar la URL
Colombia Colombia · Bogotà
Voto de Hetrigan:
6
Drama Josh Waitzkin (Max Pomeranc) es un niño normal, pero también un prodigio del ajedrez. Tiene verdadera pasión por el ajedrez y quiere convertirse en un nuevo Bobby Fischer, su ídolo. Su padre (Joe Mantegna), un periodista deportivo, le apoya en todo, decidido a que su hijo se convierta en un futuro maestro. Para ello le asignan un entrenador de lo más frío, Bruce Pandolfini (Ben Kingsley), que le enseña las estrategias de Bobby Fischer. (FILMAFFINITY) [+]
30 de marzo de 2010
1 de 1 usuarios han encontrado esta crítica útil
¿Que habría pensado el Gran Bobby Fischer de esta película? Tal vez le recordaría su olvidable y penosa participación en el torneo de … de …… ooops! … Bobby Fischer indudablemente fue tan genial en el tablero como controversial fuera de él (recomiendo las críticas de Tolstoievska y Fej) y aunque no esté muy familiarizado; creo, merecía un mejor Homenaje; si es que en algún momento paso por la irregular “mente creativa” del Guionista-Director Steven Zaillian, semejante intención (aunque para ser justos, la mitad del trabajo ya lo había realizado el homónimo literario, el cual jamás buscaré). La inclusión de secuencias pasadas que retratan pequeños momentos en la vida del Gran Maestro Fischer en vez de buscarlo, parecen mero excipiente de una historia que se esfuerza por trascender sin conseguirlo, conducida; por si ya fuera poco por un guión – que como diría un amigo – se escribe solo.

Sin llegar a resbalar a los abismos del tedio o la incoherencia, e incluso atreviéndose a cuestionar el sacrosanto Ideal del Ídolo Americano (Ajedrecista, en este caso), Zaillian casi malogra una partida que no pintaba tan mal desde el comienzo. En parte gracias a algo de humor y a la familiaridad de ciertas situaciones aunado a la naturalidad del actor principal que infortunadamente redundará en el desarrollo del filme y hasta el final en actitudes que parecen traicionar su naturaleza infantil y la de su oponente ¿era tan difícil poner a unos niños divertidamente a jugar? Sí, me desagradó que los chicos especialmente el cari-torvo contrincante fuera usado como parte del ardid para llegar al predecible desenlace. De igual manera el drama Padre–Hijo y el conflicto Profe–Estudiante al no evocar mayores emociones se sienten poco creíbles; como inexplicables resultan ciertos claroscuros que aparecen en algunas escenas de los pequeños cerca del final de la película; ¡Bueno! Supongo que el realizador nunca creyó que estaba trabajando con críos, en fin; picardías de este tipo el film se esfuerza en endosarnos por aquí y por allá, pero pues insisto: ¡No me las trago!

Si bien la trama en la que se inspira la película pudo ser interesante, su contraparte cinematográfica deviene simplemente mediocre y carente de cualquier ambición. Y para terminar en una nota alentadora ja ja ja! diré que la película hace bien en advertir que aunque el Ajedrez estimule el desarrollo cerebral temprano ¿? Tal vez no sucede lo mismo con el desarrollo social y espero en verdad que Bobby no haya sido un ejemplo de esto.
Hetrigan
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow