He de decir que no soy objetivo para criticar este film, porque curso el tercer año de magisterio, y estoy realizando ahora mis prácticas en un cole con niños de 6º. Por tanto, la película me ha encantado en su fondo, pero quizá no tanto en su demasiado melosa forma.

Por lo que he podido ver, y estudiar, el gran problema que está existiendo hoy día en las clases es la disciplina, el orden y el respeto. En esta película se representa muy bien lo que la falta de eso significa (quizá representado en un caso extremo de USA. Pero perfectamente válido para nuestras aulas. Nos encontramos con niños que no obedecen, que están desmotivados, que se aburren y molestan. Y cientos de profesores-funcionarios se obstinan en no querer mirar hacia el lado que deben mirar. Echan la culpa al sistema, o a los padres, incluso a los propios alumnos. Pero eso sí, jamás a ellos mismos. Ellos nunca se equivocan.

Lo que la maestra de la peli demuestra es ilusión por su profesión, amor por lo que hace y por sus alumnos. Yo lo he podido ver en la vida real.

Lo que le pasa con su marido es lo que le pasan a muchas parejas. Ella se siente llena con su trabajo, pero su marido no se molesta en comprenderla, en desear que ella sea feliz. Le da a elegir entre su pasión y su vida. Sus alumnos no le dan a elegir entre su marido o ellos.

Y la maestra que lleva 30 años, que asco. Es la lacra de la educación, esos carcamales que parece que sólo están en los centros para crear mal ambiente. Yo lo he visto con mis propios ojos; esos que se autodenominan "maestros", cuando lo único que han hecho es aprobar una oposición, ante no se sabe muy bien quién, ni en qué circunstancias.

Por suerte, en la peli hay un final feliz, y por suerte también, en la vida real aún hay algunos pocos privilegiados que disfrutan de la enseñanza de un buen maestro, por ejemplo, como mis alumnos en prácticas de este año, que tienen la suerte de estar con uno de los mejores maestros que nunca he visto, un hombre que defiende si profesión con inusitada pasión.