"Acto de valor" no gustará a todos aquellos que vomiten con tan sólo escuchar el nombre de Estados Unidos. Teniendo en cuenta de dónde viene esta película, el trasfondo yanqui es inevitable y del todo esperable. Quien no lo vea venir es que no sabe lo que va a ver.

La historia mezcla dos enemigos históricos de los Estados Unidos: rusos y musulmanes, todo en uno. Evidentemente, quieren atacar y hacer mucho daño al país de la libertad. Nada que no nos sorprenda.

El realismo es la nota predominante de la película. Gracias a que los protagonistas no son actores, sino SEALs de verdad, todas las escenas de acción son espectaculares. La forma en la que se mueven, en la que disparan, las tácticas que utilizan, las armas... Todo es real. En este aspecto, tiene más de documental que de película de ficción.

En la parte que falla es en la de crear una trama sólida, un guión consistente y unos diálogos que no caigan en lo mismo de siempre.