— No, calla friqui. Vengo a decirte que esa serie te conducirá a ti y a millones de personas a una espiral de odio y violencia. Pasado un año después de terminar la serie, o sea el 23 de mayo del 2011, la gente comenzará a tirarse desde edificios porque ya no le quedarán pelos en la cabeza y se indignará tanto que harán sentadas en las plazas de sus pueblos y ciudades. Después llegará un humo negro cuando la gente empiece a quemar sus casas. Esa serie demoniaca empezará a enredarse tanto que acabará como un vulgar culebrón de hospitales y el anuncio de lámparas más largo de la televisión. Será un tiempo LOST. Dedícalo a algo útil como ver la programación de Telecinco.

— ¡No! ¿¡Telecinco!? ¡Quiero saber lo que les ocurre a esos personajes!

— ¿Que qué les pasará? Que harán anuncios de Loreal entre películas baratas y cameos del montón.

— Oh, entiendo…

— Bueno, tienes que ver “The Constant”, un episodio de la cuarta temporada, pero suelto y con que te leas un poco la lostpedia te vale. Quédate Perdido viendo “Perdidos”. Será lo más lógico de una serie ilógica.

— ¿Y por qué no se lo dices al mundo? ¿Por qué nos les dices que esta serie es un bluff?

— Porque soy un Maldito Bastardo y rompería el equilibrio friqui del universo.

— Oiga Sr. Bastardo, ¿y por qué me está tocando el paquete?

— Es para que sientas lo que te va a hacer pasar esta serie. ¿Recuerdas cuándo me has preguntado si venía a violarte?

— Sí.

— Bien, te he mentido.


Flashback. ¿Flashforward o simplemente Flash? Había dejado la luz encendida de mi habitación y estaban pasando una misa por la televisión. No sé por qué en una de las plantas okupas que rellenaban por completo mi habitación había un avión de juguete colgado. Estaba muy cansado y tenía flatulencias. Me toque el higadillo. Jopelines, ¡cuánta luz! ¡Qué cansado! No podía ni levantarme a quitar esa horrenda misa con gente rara sonriéndose y abrazándose. ¡Y encima los subtítulos no se correspondían con la imagen! ¡Vaya mierda! Tenía mucho sueño tampoco entendía que hacía un perro labrador retriever amarillo tumbado a mi lado con la lengua fuera. Sólo faltaba Chuck Norris. Cerré mi ojo lentamente.