Y es lo que tiene y lo que ofrece. Entretenimiento en estado puro.
La trama es simple y los intentos de emoción son fallidos pero que bien lo saben montar.
Es como comer una gamba.
Puedes comerla recién descongelada en tu cocina o puedes comerla bien hecha, con una buena salsa, en buena compañía, por la noche en un restaurante a pie de playa. La gamba es la misma pero la diferencia es evidente.

Pues tenemos al grupo de ladrones (pero muy majos todos) que hacen fácil que uno se sienta el número 12 del grupo. Clooney manejando el tema, Pitt sin dejar de comer siendo pieza fundamental y mano derecha de Clooney, los hermanos mormones, el chino, el rico, el informático, Bernie Mac y... Matt Damon. ¿Recordáis cuando Damon actuaba bien? Yo tampoco.

En el otro lado una sensual Roberts con un gran Andy con esas ropas de estilo japonés, que sumado a la mala leche le da aspecto de emperador. Y que es bajito (parece que hay que ser bajito y malo que el poder viene solo... o eso nos dice la historia mundial).

Con todo esto tenemos un cóctel muy potente que hace pasar un rato más que agradable y entretenido en especial "resolviendo" como realizan las tácticas. Un 8,5 sin dudas.

Una pena sus continuaciones que sin ser pésimas están lejos de esta. Y paso de comentar el bochornoso momento de Julia haciendo de Roberts.