El villano de turno es un idiota que defrauda y provoca verguenza ajena en todas sus escenas. Al principio de la película da cierta intriga ver esos extraños artefactos que parecen llamar a los fantasmas, para luego descubrir que simplemente quiere destruir a la humanidad porque está loco y es malo malísmo.

Más metidas de pata: cuando la McCarthy prueba el equipo y empieza a pegar saltos mientra dispara el rayo para todos lados. Cuando salen con el Ecto-1 a jugarse la vida y actuan como si salieran de fiesta. Cuando dan explicaciones pseudocientificas frikis sobre los equipos nucleares como el que está jugando con piezas de lego. Los chistes, como he dicho ya, sin gracia, apenas me reí en toda la película, y ya por la mitad y empecé a desear que se acabara porque me estaba aburriendo (mala señal). La batalla final, alarde de grandes efectos especiales, pero ni la menor épica ni emoción. El cameo de los antiguos actores, dejándose enredar en este desastre. Las protagonistas bailando tras la vergonzosa y malograda escena del concierto, haciendo gala de un carisma ni de lejos logran tener. Quizá la peor y la estocada final: cuando el villano se convierte en un fantasmita de dibujos animados. Cuando la ciudad vuelve a estar como antes por arte de magia tras la destrucción sufrida. Cuando salen al balcon para felicitarse de su victoria y "gran esfuerzo", y amenazan con una segunda parte (va a ir su tia, porque para mí esta saga ha muerto).

En fin si estás pensando ir a verla, mi consejo es NO. No vayas a ver este bodrio sin piés ni cabeza. Ni aunque te inviten. Garantía 100% de que te arrepentirás.