Creo que Cameron Crowe se ha lucido en esta cinta, es sencillamente perfecta. Si te gusta el buen cine y la buena música tienes que verla, no tiene desperdicio. Realmente te traslada a los años 70 y tiene notas muy graciosas. Las interpretaciones son todas buenisimas, el protagonista lo clava. Además es bonito saber que eso ocurrió de verdad y que es la propia experiencia del director, que seguro la hizo lo más fiel posible a la realidad. Desde luego te hace ver que aunque una banda aparente estar unida en el escenario, puede estar desmembrandose por detrás de éste.

Buenísima.