No me siento nada culpable por haber disfrutado tanto o más por el añadido de la nostalgia, con esta adaptación de "El embajador de las sombras" (1975) perteneciente a la serie de "Valerian" que cuando llegó a mis manos hace ya la friolera de 40 años. Al igual que cada una de las veces que lo releía a lo largo del tiempo era evidente que la simplicidad del argumento distaba muy mucho del rico, ingente y colorido universo de seres y artefactos que aparecían en sus viñetas que por sí solos lo colocaban en un sitio de honor en mi biblioteca comiquera, al lado de los Tintín, Blueberry y demás de la editorial Grijalbo/Dargaud. Besson adaptación incluida ha conseguido el mismo efecto.

Luc Besson, de mi quinta, nunca tuvo pudor de echarle un pulso al cine de entretenimiento USA y desde la poderosa y prestigiosa industria cinematográfica francesa, colar algunos títulos de diferentes géneros en lo más alto de la taquilla. Ahora se da el lujazo personal muy caro de llevar a la pantalla uno de esos cómics de los que disfrutó de adolescente y aunque lamentablemente solo ha cubierto gastos, ahí queda eso o que le quiten lo bailao que diría el otro.  Servidor personalmente le estará eternamente agradecido.

Y lo que queda a la postre para todos aquellos que no conocieran la obra de Méziéres y Christin es un apabullante despliegue visual y estético en el que se encuadra una fantasía espacial de las que hacía tiempo no disfrutábamos con un argumento más o menos trillado en el que dos agentes temporales de la Tierra, Valerian y Laurien, de aspecto aniñados ya daban que hablar mucho antes de que la princesa Leia, Luke Skywalker y Hans Solo nacieran para la pantalla. Los préstamos que Georges Lucas tomó de la obra de los autores franceses son más que evidentes.

Nada que objetar a los añadidos al original (gozoso el mercado y el Glam Club donde se luce Rihanna / Bubble). En el debe la escasa química entre Dane Dehaan y Clara Delevingne. El primero tiene un gran problema de carisma, pero al igual que Carrie Fisher y Mark Hamill en Star Wars  ellos siempre fueron lo menos importante de las sagas.
P.D.: Señor Besson, antes de jubilarse, atrévase con "El Teniente Blueberry". Porfi.

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