Entramos y progresamos a lo largo del desarrollo de su historia, en las aventuras épicas de Uthred De Bebbenburg, sajón de nacimiento y danés de crianza, en los años 870 D.C aproximadamente, los comienzos de Inglaterra como la gran nación que actualmente es, comienza con explosividad, sangre, batallas y luchas, se va convirtiendo en un muy buen continuo de emotividad, amor, tristezas y cariño para con sus personajes, en especial, con el protagonista Uthred, que con sus habilidades de guerrero, se encuentra inmerso en las distintas luchas de poder e influencia de daneses e ingleses, sin perder su convicción como personaje, se adentra en las profundidades de la nación y pelea, lucha con principios y determinación, a lo largo de la historia, su grupo de amigos leales y valientes guerreros que al igual que él, con el correr del tiempo, genera grandísima empatía, para con el espectador y la maravillosa creación de gratitud y nostalgia para con sus acciones, solo una gran obra puede generar eso, “The Last Kingdom” lo logra iniciar, pero lo mas importante, consigue mantenerlo, a lo largo de sus cuatro temporadas.

No tendrá el poder narrativo de “Game Of Thrones”, tampoco tiene la culpa de estar dentro de la era de “Westeros”, pero es muy buena, excelentes coreografías de peleas, impecable fotografía y un héroe central inmersivo, querido y arropado por una multitud de personajes bien diseñados, confeccionan en totalidad una grandísima obra que sin dictatorial rigor histórico nos enseña los dolores del parto, de Inglaterra como país a través del dinamismo de Uthred y sus valientes amigos.