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Voto de Sibila de Delfos:
10
Drama Diciembre del año 2004. María (Naomi Watts), Henry (Ewan McGregor) y sus tres hijos pequeños vuelan desde Japón a Tailandia para pasar las vacaciones de Navidad en la playa. Una mañana, mientras se encuentran todos en la piscina del complejo a orillas del mar, un tremendo tsunami destroza el hotel y gran parte de la costa del sudeste asiático. Este desastre cambió para siempre la vida de millones de personas. Esta es sólo la historia de una familia. (FILMAFFINITY) [+]
14 de octubre de 2012
9 de 13 usuarios han encontrado esta crítica útil
Nada más fácil hay al hablar de Lo Imposible que entrar al trapo en el debate sobre si es culebrónica, si busca la lágrima fácil, si la música es manipuladora, si el guión maneja las emociones del público sin dejar espacio para la duda. Pero al final, sólo cabe hacerse una pregunta. O varias. ¿Es manipuladora una película que cuenta una historia tan inevitablemente emotiva como ésta? ¿Qué otra clase de música se le puede poner a un drama así, aparte de la que ha compuesto muy bien Fernando Velázquez? ¿Busca un guión sobre el tsunami del Pacífico la lágrima fácil, cuando lo más natural del mundo es llorar al ver una catástrofe de tal magnitud (es más... cuando muchos lloramos al ver las imágenes por televisión)?
Si la respuesta a esas preguntas es sí, y si éso es un fallo... pues ojalá hubiese más películas tan fallonas como Lo Imposible.
Porque Lo Imposible va camino de convertirse en clásico. Como La vida es bella, va camino de ser esa película que pone de acuerdo a casi todo el mundo, que emociona a casi todos y convence a casi todos. Imposible que sea de otro modo, cuando el guión de Sergio G. Sánchez rebosa tanto amor y emoción. Saber que ésta es la historia real de una familia española es tan increíble como milagroso es pensar que realmente terminó así. Es la suerte, en toda su magnitud, y por supuesto el amor de una madre por su hijo, de un padre por sus hijos. La película refleja todo éso, y gracias a Bayona se convierte en una experiencia inolvidable. Se ha hablado mucho del tono spielbergiano de la cinta, que ya estaba presente en El Orfanato, y lo cierto es que hay que reconocerle a Bayona esa misma elegancia y ese clasicismo a la hora de manejar las emociones y trabajar el encuadre que tiene el maestro Steven. Nadie diría que es su segunda película, y éso ya es decirlo todo. La fotografía, el montaje, el sonido y por supuesto los efectos visuales contribuyen de forma magistral, angustiante y terrible a hacernos partícipes del horror de la naturaleza. Especialmente memorable es la secuencia posterior al tsunami, protagonizada en solitario por Maria y Lucas.
Y qué sería de Maria y Lucas, los dos protagonistas, sin los actores que les dan vida. Tom Holland está simplemente extraordinario, regalando una actuación soberbia para alguien tan joven. Y Naomi Watts... lleva años siendo una de las mejores, pero quizás hasta ahora no habíamos podido verlo con tanta claridad. Tanto da que en gran parte del metraje apenas hable o se mueva. Sólo con los ojos y el cuerpo lo expresa todo, y éso sólo lo hacen las mejores. Ewan McGregor puede que a nivel general haya tenido interpretaciones mejores, pero sin duda esta película muestra el que es sin duda el instante cumbre de su filmografía, que no es otro que la ya famosa llamada de teléfono de su personaje a un familiar. Es un grandísimo actor, normalmente infravalorado en favor de otros con menos talento. Los otros niños, Samuel Joslin y Oaklee Pendergast, más que actores, son simplemente niños, y como tal dan una lección de naturalidad apabullante (es de agradecer que el guión no los haga repelentes sabihondos, sino pura y llanamente... niños). Muy destacable es también la breve intervención de Geraldine Chaplin, Marta Etura y todos los actores desconocidos que aportan su grano de arena.
En definitiva, cine en mayúsculas, del que se ve, se vive y se experimenta en carne propia, que sigue dando la razón a los que creemos que el cine español no tiene nada que envidiar al de ningún otro país (y antes de que salga algún listo diciendo que la película no es española... revisen los créditos, vean cómo todo el equipo es español, las productoras son españolas... sólo los actores y la lengua inglesa del guión no lo son), y que encumbra desde ya a Bayona como uno de los grandes.

Lo mejor: Todo, pero especialmente la extraordinaria dupla que forman una estratosférica Naomi Watts y Tom Holland.
Lo peor: Nada.
Sibila de Delfos
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