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Voto de septemberghost:
3
Thriller. Fantástico. Acción Mientras el gobierno de EE.UU no tiene claro cómo responder a una visita alienígena a la Tierra con intenciones malignas, Amanda 'El Muro' Waller (Viola Davis), la líder de la agencia secreta A.R.G.U.S., ofrece una curiosa solución: reclutar a los villanos más crueles, con habilidades letales e incluso mágicas, para que trabajen para ellos. Sin demasiadas opciones a dar una negativa, los ocho supervillanos más peligrosos del mundo ... [+]
8 de agosto de 2016
40 de 51 usuarios han encontrado esta crítica útil
Normalmente escucho que las películas adaptadas de cómics (Marvel y DC concretamente) son malas. Salvo contadas excepciones se asume que, a menos que seas un espectador casual, un fanboy/fangirl del género o un hardcore de los cómics, estas películas van a resultar siempre el mismo cuento. Este año existía tenía la oportunidad de dar un giro de tuerca absoluto con dos películas en concreto. La primera, Deadpool, cosechó un gran éxito y se encumbró como ejemplo de algo que se distanciaba radicalmente de lo esperable en el género. ¿Resulta mejorable? Sí, pero ahí apareció como un aperitivo más que suculento antes de la llegada de la gallina de los huevos de oro.

Lo que debería haber sido Suicide Squad, vamos.

Situación: eres el director (y guionista, ojo) de Suicide Squad y tienes como protagonistas a un grupo de psicópatas, criminales, asesinos y demás calaña para, literalmente, destrozar todos los esquemas del público (en el buen sentido, obviamente). A esos protagonistas se les asigna un reparto de INFARTO, se suma una fase de publicidad alucinante, un márketing espléndido y una banda sonora llena de temazos a reventar. Tienes al público en el bolsillo desde que sale el primer tráiler (en Halloween proliferaron los Jokers y las Harleys), las redes sociales llenas de hashtags, menciones, retuits, reblogs y demás neologismos. Tienes todo a tu favor.

Y la cagas. Bien cagada.

Metes la pata de forma tan profunda que un amante del cine (y alguien muy crítico con este tipo de películas y de su potencial) se lleva las manos a la cabeza durante varios días sin saber qué decir al respecto de lo que has convertido con todas esas herramientas. Tanta anticipación, tantos meses, tantos teasers, tanto material, tantas posibilidades... Y todas y cada una de ellas a la basura. Claro, luego entra uno a las redes para ver qué dice la gente y observa que por un lado están las personas erre que erre con la matraquilla de "otra más de superhéroes". Por el otro, están los individuos que deciden defender la película con el brillante argumento de "Marvel es de niños".

Como si ser fan implicase decantarse por un bando como si esto fuera Civil War. Hagan el favor.

La peli es mediocre. Lo digo ya, y lo digo porque esta crítica no profesional está fundada en una opinión meditada desde hace varios días. No es buena, tampoco es mala.

Peor: es un bajón.

Es un plato que prometía un sabor innovador y que finalmente resulta ser la misma jodida hamburguesa de la esquina, la que llevas comiendo desde que eras un crío y que estás harto de comer pese a que rellene tu estómago. No lo aceptas.

¿Mis razones?

PERSONAJES: Un reparto coral no es fácil de manejar, pero puede conseguirse si se da la suficiente importancia y profundidad a la historia de cada uno. Aquí se salvan únicamente Deadshot (Will Smith) y Amanda Waller (Viola Davis), que resultan solventes aunque nada extraordinario. El resto del reparto, que tiene un talento espectacular, es desaprovechado hasta decir basta: la complejidad psicológica de Harley Quinn (Margot Robbie, espléndida dentro de lo que cabe) se desecha en favor de pura superficialidad, la construcción de Killer Croc (Adewale Akinnuoye-Agbaje) es inexistente, Boomerang (Jay Courtney) parece que fue invitado a la película a última hora, Rick Flagg (Joel Kinnaman) es parte del decorado, Diablo (Jay Hernandez) tiene una de las mejores historias y se cuenta de absoluta pasada sin hacer que nos importe en absoluto, Katana (Karen Fukuhara) pasea por ahí con su espada y soltando dos frases en japonés, Enchantress (Cara Delevingne) está metida a calzador de forma dolorosa y Slipknot (Adam Beach) es... Frustrante.

VILLANOS: La amenaza principal es malévola, y punto. ¿Buscas razones? No las hay: son malos, son muy fuertes y hay que acabar con ellos porque quieren destruir el planeta. Porque no hemos visto nunca unos villanos con semejante trasfondo, jamás en la historia del género. Los miras y dices "va, son malos". Y a otra cosa mariposa, no te implicas: no te importa. Así que intentas agarrarte a un clavo ardiendo que era posiblemente el mayor atractivo de toda la película: el Joker de Jared Leto. Es ahí donde surge una sed de sangre hacia la persona que cortó y editó la película, y en especial hacia el guionista que decidió meter al mejor villano de la historia del cómic (alto y claro, que se oiga) como un tipo que está ahí de paso. Sin más. Como precedente estaba el Joker de Heath Ledger, posiblemente el más reconocido de la historia después del de Mark Hamill, que tuvo oportunidad de brillar a lo largo y ancho de "El Caballero Oscuro" de Christopher Nolan. Y vas y le das a Jared Leto (intérprete con un talento abrumador) 10 minutos en el corte final de la película. Y de esos 10 minutos, dejas que aparezca de forma seguida 30 segundos antes de cortar y pasar a otra cosa dando la sensación que estás viendo a un macarra de segundo esperpéntico y sin sentido. Sin peligro, sin amenazas, sin nada que caracteriza al Joker. Destruyes un icono.

Y así es como destruyes una película: quitándole el alma. Si no tienes personajes con motivación y trasfondo con los que identificarte ni obstáculos desafiantes que rompan con lo establecido en el género... ¿Cómo pretendes entonces que "Suicide Squad" dé una lección al mundo entero?

No puedes. Y punto.

Decepción, amigos, decepción...
septemberghost
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