Haz click aquí para copiar la URL
Argentina Argentina · Mar del Plata
Voto de FranciscoG:
7
Drama Década de 1990. Tonya Harding es una prometedora patinadora sobre hielo estadounidense, una joven de clase obrera, siempre bajo la sombra de su implacable e insensible madre, pero con un talento innato capaz de hacer un triple axel en competición. En 1994, su principal rival para los Juegos Olímpicos de Invierno es su compatriota Nancy Kerrigan, a la que, poco antes de los Juegos, un matón a sueldo la golpea la rodilla con una barra de ... [+]
2 de noviembre de 2018
1 de 1 usuarios han encontrado esta crítica útil
En general, las películas deportivas están muy restringidas a un nicho especializado de consumidores, salvo que hayan sido ejecutadas con la maestría de "Carrozas de Fuego".

"Yo, Tonya" es una película de nicho, y difícilmente la veas si no eres un aficionado al patinaje artístico. Pero los productores se esforzaron en hacer algo más con el caso y lograron lo que fué adecuadamente definido como una "comedia negra", una especie de hermanita menor de "Goodfellas". O sea que, si te gustan las comedias oscuras, disfrutarás de esta película. Y lo mejor de todo es que relata historia.

Resumen: la humilde y poco educada patinadora Tonya Harding, crecida en un hogar conflictivo y victima de un matrimonio igualmente accidentado, "basura blanca" como dicen los anglos acomodados, es el patito feo del patinaje hasta que a fuerza de mucho trabajo y voluntad -era una gran atleta- logra imponerse y ascender en los juegos nacionales, para luego verse en la antesala de los olímpicos. Como sabemos, el Oro Olímpico entrega 1 millón de dólares a la ganadora, lo que para su poco escrupuloso entorno era un permiso para matar. Este entorno, su marido y el "especialista en seguridad" amigo de su marido, y los amigos de los amigos, planean de algún modo, sacar de circulación la principal contendiente interna de Tonya, la morena, bonita y burguesa Nancy Kerrigan. La idea inicial fué asustarla un poco, pero a los tontos "a cargo" se les fue la mano y le pegaron un bastonazo en la rodilla. Con tanta suerte, o tal vez con tanta delicadeza, que un mes después Nancy estaba patinando de nuevo y lista para representar a EEUU en los olímpicos de 1992 (¡donde salio medalla de plata!). Los ejecutores fueron tan bobos que dejaron indicios por todos lados y las investigaciones inmediatamente apuntaron a ellos. Finalmente se descubrió todo y Tonya fue acusada de saber lo que iba a ocurrir y no evitarlo. La condenaron a pagar varios miles en multas, a 500 horas de trabajo comunal y la echaron del patinaje competitivo. Con eso la terminaron de arruinar. Así que se dedicó a otras cosas, como intentar una carrera de cantante, casarse con un millonario y boxear. Era una mujer sólida y ganó tres de seis peleas. Pero uno siente que merecía una oportunidad más en el patinaje, porque era una atleta notable, simplemente apartada por diferencias sociales. Y esa es la nueva onda de opinión dominante, luego de soportar, la pobre chica, 24 años de ostracismo. Nancy Kerrigan se quejó, el año pasado, de la súbita revaloración de Tonya, diciendo: "¡Pero si la victima fui yo!".

Las actuaciones son muy buenas, menos una. El "ambiente del patinaje" esta bien representado. Lamento la iluminacion equivocada de los estadios, que no se muestra a giorno durante las competencias, como debe ser. Debido a que Margot Robbie jamás hubiera podido hacer un triple axel (hay que comenzar a los 5 años como muy tarde), y menos aun, deslumbrante, deducimos que han recurrido a unos muy discretos efectos especiales 3D. El primer triple axel femenino norteamericano fué hecho por Tonya en la USFSC de 1991 y no resulto tan elegante como lo pintan. En realidad hizo un aterrizaje de emergencia, igual a los de Midori Ito por la misma fecha. Como en la aviación, en patinaje artístico la maestría se muestra al aterrizar. Solo en este siglo se vieron triple axels femeninos decentes.

Sobre la excepción mencionada a las actuaciones, me refiero a Margot Robbie. Los primeros años de Tonya corren a cargo de dos niñas encantadoras muy parecidas a la que debió ser la original. Cuando Margot entra al ruedo la patinadora ya tiene 15. Una mujer de 27 no puede representar de ningún modo una chica de 15. Y por muy tosca que fuera Tonya adolescente, no es creíble que pareciera una buscona de campo de concentración. Así que en vez de una adolescente presenciamos una adulta haciéndose la estúpida hasta que el filme da otro salto de cinco años. Luego la interpretación mejora pero el maquillaje falla, representando a Tonya continuamente demacrada y fea a lo largo del resto de la película. La verdad es que Harding en la década de los 90 era bonita y suave y no esa especie de Guasona que vemos en la pantalla.

En los créditos finales siguen videos sorprendentemente claros de la TV de la época, con el programa largo de Tonya donde hace el primer triple axel femenino de Estados Unidos, su momento más glorioso. También hay tramos de reportajes donde se puede constatar lo linda que era. En aquella época las patinadoras parecían vedettes y el figure skating femenino era, además, un espectáculo sexy. Luego la International Skating Union comenzó a apretarle los tornillos a las patinadoras exigiéndoles más y más, y resulto que solo las adolescentes etéreas podían cumplir con las nuevas exigencias o bien, veinte añeras sólidamente musculadas.

Cerca del final de los créditos aparece el reportaje real al amigo del esposo, un papanatas ridículo, mitomano y narcisista, un "Torrente" real, machaconamente convencido de ser un experto en seguridad y contraterrorismo.

Espero que con esta película la opinión general vire lo suficiente para impulsar el reconocimiento, aunque tardío, de esta heroína.
FranciscoG
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow