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Voto de Luis Guillermo Cardona:
9
Drama. Romance Julie Marsden y su prometido parecen destinados a no compartir sus vidas. Las continuas exigencias y desaires de ella terminan alejando de su lado al hombre que verdaderamente ama. (FILMAFFINITY)
14 de mayo de 2011
8 de 9 usuarios han encontrado esta crítica útil
Magnífica descripción de una sociedad obtusa (segunda mitad del siglo XX). Perfecta recreación de los códigos absurdos que determinaban la hombría. Impecable definición del sentir de los sureños estadounidenses frente a la Guerra de Secesión (la de los conservadores y la de los liberales). Clara -aunque pulida- ilustración de ese rol de exclusiva servidumbre que desempeñaban los negros entre las familias esclavistas, porque queda faltando el deficiente, y en muchos casos, abominable trato que tantas familias les daban. Objetiva precisión de las ventajas comerciales del norte contra el sur... y, sobre todo, ¡una impresionante historia de amor!, con una mujer que sabe querer profundamente, mientras lucha de manera denodada para liberarse de convenciones y atavismos.

La historia, escrita por Clements Ripley, Abem Finkel y John Huston, quienes adaptaron la obra, "Jezebel" (1933) de Owen Davis, transcurre en la New Orleans de 1852. El lugar, es una Plantación donde vive una familia bastante ajustada a las reglas del ya viejo siglo, pero la hija, Julie, decide transgredirlas para vengarse de lo que considera un desaire de su prometido. Esto motivará un rompimiento de la relación y un largo penar se dará en lo sucesivo, mientras, un amor que aún palpita con gran fuerza pugna por reivindicarse cometiendo, cada tanto, una y otra improcedencia. La madre se acuerda, entonces, de Jezabel, la mujer que decía hablar de parte de Dios, pero engañaba a los hombres haciéndoles cometer toda suerte de inmoralidades (Apocalipsis 2:20)

Se avecina la cruenta y definitoria Guerra Civil, y otra calamidad, como la de 1830, se acerca con el viento: ¡La fiebre amarilla! Muchas emociones se jugarán entonces y algunos corazones serán puestos a prueba. Entre ellos, Julie y Amy Bradford, exultarán a la vida con su espíritu de compromiso y su fortaleza femenina al ponerse, frente a frente, ante una decisión que las cambiará para siempre.

Diálogos certeros; una ambientación imponente y muy ajustada al siglo XIX; una brillante banda sonora; y una fotografía esplendorosa, sirven para enmarcar el lucimiento de esa sorprendente y penetrante actriz que fuera Bette Davis. Mención necesaria para el gran conjunto actoral que la acompaña, siendo George Brent (Buck Cantrell), Fay Bainter (Tía Belle), Margaret Lindsay (Amy), y Richard Cromwell como Ted, quienes mejor solventan una historia apasionante e intensa como pocas.

El director, William Wyler, vuelve a dejarnos convencidos de que es uno de los grandes.

Título para Latinoamérica: JEZABEL, LA TEMPESTUOSA
Luis Guillermo Cardona
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