Lo bueno que tiene esta serie respecto a otras destinadas a adolescentes es que - aparte de mostrar el lujo de los niños de papá más forrados de nueva york y sus idas y venidas con el alcohol, las drogas, los líos amorosos, cuernos y demás- es que muestra su lado humano: familias rotas, infidelidades, secretos, delitos, falsas apariencias, tapaderas, etc; cosas que nos afectan a todos por igual, independientemente de la posición social que ocupemos.

Lo malo es que a veces su mundo parece tan de cartón y postizo (ropa, lujo, fiesta cada noche y luego van y sacan sobresalientes, sexo cada dos por tres, dinero que gastan en gilipolleces, caprichos estúpidos, berrinches pueriles..) que en muchas ocasiones no es creíble. Además, ya hay mil series antes que ésta que tratan el mismo tema (melrose place, sensación de vivir, falcon crest, OC. one three hill, etc).

Al menos hay un personaje desconocido "gossip girl" que los observa a todos (a saber cómo) y se entera de todo.
Con todo y con eso, los personajes de "Blair" y de "Chuck" se llevan la palma: son los más complejos, interesantes y, por decirlo de alguna manera, "oscuros", sólo por ellos la serie tiene algo más de gracia que las demás, aunque no mucha.
En resumen: es bastante entretenida, aunque apenas aporta cosas nuevas.