Hilarante a más no poder este debut en la dirección de Allen ( lo de Tiger Lily es otra cosa ) es auténticamente fabuloso, tronchante a la vez que profundamente sarcástico y corrosivo.
Con un montaje absolutamente genial aderezado con unas situaciones treméndamente cómicas amén de burdas y maravillosas pantomimas ( las narices de los padres sientan cátedra ) Allen realiza un debut en la dirección cinematográfica por la puerta grande.
Este film es auténtico humor judio, paródico a más no poder, con pinceladas de los irrepetibles hermanos Marx....
Realmente poco más puedo decir sencillamente que se trata de esos films que son de obligada revisitación cada cierto tiempo y para el que no lo haya visto y quiera reirse e incluso pensar también que no pierda el tiempo y se ponga ya a ver esta maravilla del humor de todos los tiempos.
Un saludo, Efelson.