En la ira de Kahn aparece un hijo del capitán Kirk que le quita mucho protagonismo, y aunque Kirk desde el principio de los tiempos ha sido todo un ligón, siempre ha habido una tensión emocional muy fuerte entre Spock y Kirk, que ninguna de las múltiples bellas damiselas ha llegado a eclipsar. En la ira de Kahn conocemos a la maravillosa científica a la que Kirk ama y con la que tuvo un hijo. Esa peli es una historia familiar resultado de un "Te amo, pero mi vida está en el Enterprise, así que te dejo". Para colmo, en la escena final que todos recordaremos con lágrimas en los ojos; SPOCK MUERE. Heroicamente si, para salvarlos a todos diciendo aquello tan bonito de: "A veces el bienestar de la mayoría es más importante que el bienestar de la minoría... o de uno solo." Y su glorioso funeral con aquella frase tan bonita también de su amigo James: "De todas las almas que he conocido, la suya era la más... humana". Siendo la peli bastante mala, se aseguró de tener un final digno de recordar y que hiciera llorar hasta a los chicarrones de 90kg de músculo más duros del lugar. Pero en resumen: Se cargan a Spock en una peli del montón.

Leonard no podía dejar las cosas así.

**Fin del spoiler de La ira de Kahn.**

Para empezar, ese hijo de Kirk que se habían sacado de la manga y que le había robado a Spock todo su protagonismo, muere sin que este hecho tenga la más mínima importancia. A la madre de la criatura y amada de Kirk sencillamente la ignoran. Y ahora sí, vamos a tirarnos toda la película peloteando al personaje de Spock por todo lo mal que se lo hemos hecho pasar en el anterior filme. Al parecer su féretro había caído en un planeta que hacía renacer las cosas, así que durante toda la peli vemos como el pequeño Spock va creciendo muy rápidamente, deteniéndose especialmente en el tiempo en el que es jóven y lozano, y va por la vida con el torso al aire. Vislumbrada su hermosa juventud, torso incluido durante el tiempo que a Leonard Nimoy le parece necesario, alcanza la edad en la que murió, ocupando su puesto, su protagonismo y toda la atención de su capitán.

A mi me moló un montón esta película. Me imagino a Leonard Nimoy leyendo su guión de "La ira de Kahn" diciendo: ¿Que en esta peli me ignoran, me suplantan, y finalmente me matan? Os vais a enterar en la próxima peli, que por cierto, voy a dirigir yo." Y así surgió Star Trek III: En busca de Spock.