Nos llega esta comedia dramática del director Hugo Gélin, es un remake de la exitosa comedia mexicana " No se aceptan devoluciones". El director sólo cogió el esqueleto de la historia, el resto lo cambió todo e intentó demostrar todo lo que se puede hacer por un niño.

La historia que nos presenta mezcla sobre todo drama y comedia, te deja muy tocado después de verla. El mensaje fundamental que nos da es que hay que vivir el presente, la película provoca lágrimas pero siempre con una sonrisa en la cara. Podemos decir que incluso la parte dramática es positiva porque te hace sentir bien. Uno piensa que bonita es la vida y que bonito es educar bien a nuestro hijos.

El título de la película es de una cita filosófica de Gaston Bacherlard, que nos viene a decir que en la vida hay que mirar siempre al futuro y no tanto al pasado.

Omar Sy como casi siempre está bastante bien, en su papel de padre soltero que tiene que sacar adelante a su hija. La actriz Gloria Colston da vida a la joven protagonista, los dos personajes tiene una conexión total.
El papel de la madre lo interpreta Clémence Poésy, en esta ocasión de manera mucho más secundaria que la pareja protagonista.

Lo mejor: La conexión entre padre e hija.
Lo peor: La tristeza que provoca.