Uno de los mejores thrillers surgidos en los últimos años que, entre las muchas virtudes de esta original y fascinante propuesta, está que mete de lleno en la incertidumbre tanto al protagonista como al propio espectador, tiene un inesperado giro en su parte central donde nos vemos sumidos en el desconcierto y finalmente muestra los cabos para que sean atados y redondear coherentemente la historia.

Félix tiene miedo a que haya un intruso en su casa, en su vida, ¿se está volviendo loco?

¿Por qué su chica le ha abandonado?

En la secuencia en que la escucha hablando con alguien en la cocina, entra y no ve a nadie, parece como si hubiera un complot contra él, ¿con quién hablaba realmente? ¿habia alguien allí?