The Yellow Submarine fue la película por antonomasia de la aventura del cuarteto de Liverpool en el mundo cinematográfico. Después de las dos películas en las que los propios Beatles actuaran en “A Har Day’ s Night”y “Help!” bajo la dirección de Richard Lester y el mediometraje llamado “Magical Mystery Tour” en la que fueron los propios componentes quienes se encargaron de dirigir y montar su película (en la que también intervienen) se embarcaron en el mítico proyecto de Yellow Submarine.

La película sigue la evolución lógica de los Beatles. En “Magical Mystery Tour” ya vemos que el cuarteto de Liverpool se sirve de una imaginación desbordante y que su surrealismo necesita tirar de mucha imaginación para poder funcionar. Imágenes como el maratón del Mystery Magic Tour o sobre todo la trama paralela (y mal metida, porque no decirlo) de los magos (en la que los Beatles se trasladan a un mundo paralelo por encima del primer mundo en el que se supone funciona el bus) revelan que las personas de carne y hueso se quedan cortas para desarrollar su historia. Era necesario pasar a la imaginación, y por eso, se sirvieron de la animación, porque era el medio perfecto para que los Beatles pudieran desarrollar todas sus ideas más descabelladas y para que las múltiples dimensiones, ideas disparatadas e historias pudieran funcionar a la perfección. Yellow Submarine representa ese paso necesario.

Y también la música estaba cambiando, 1968, la banda ya dejaba de lado su aspecto juvenil y despreocupado para entrar en una música más profunda y con tintes más místicos. La perfecta banda sonora refleja esta doble condición de los Beatles, donde encontramos joyas fáciles y pegadizas como la canción que da origen al título y que se convierte en una perfecta entrada a la película, o canciones como Nowhere Man o Eleanor Rigby, mucho más reflexivas. Como siempre en el cine Beatle, la música se configura como precedente del Videoclip, aunque es cierto que en Yellow submarine las escenas musicales se relación adecuadamente con el contenido de la película.

Y es que el argumento de la película ya nos refleja el amor a la música y al arte que profesaba el grupo. En un mundo imaginario, una raza malvada apodada Los Blues Meanies se encargan de eliminar cualquier signo de alegría en Pepperland. Para ello tratarán de hacer desaparecer uno de los elementos con el que disfrutaban los nativos del lugar: La música. Por suerte, Los Beatles recibirán la misión de hacer que esto no ocurra y devolver la libertad a Pepperland.

Queda claro los motivos de la película, los Beatles lanzan una oda lírica y muy singular, en la que la importancia de las artes y de la música queda más patente que nunca. Sin ellas el mundo se revela como un lugar triste y cruel, Pepperland no deja de ser una imagen múltiple de la tierra. ¿Os imagináis un mundo sin música? Los Beatles tampoco. Y sólo será mediante la música y sobre todo, el amor con la que el mundo podrá eliminar el mal de la tierra. No es casualidad que una de las canciones con la que los Beatles sean capaz de derrotar al líder de los Blues Meanies se trate de “All Need you is Love”, una de las canciones más icónicas del grupo y que no hace falta entrar en detalles para ver el significado de la canción y como se entiende en el contexto de la película.

También la animación tiene un papel muy importante en la película. Como ya comentaba, era necesario un nuevo medio expresivo que permitiera a los Beatles plasmar su mundo interior. Y para ello cuentan con una animación totalmente atípica que abandona cualquier convencionalismo establecido para el cine de animación. Por eso sorprendió y sigue sorprendiendo hoy en día, y por este mismo motivo sigue consiguiendo detractores (que no aceptan el planteamiento estético tan arriesgado que presenta la película) y partidarios (que se sorprenden ante la originalidad y frescura de la obra). En todo caso, la película se aleja bastante del cine de animación más clásico, como podría ser las películas de factura Disney. No hay un intento por captar una verdadera mímesis de la naturaleza, sino que se busca el elemento expresivo de los diferentes elementos que aparecen. Se busca que el símbolo pueda substituir la imagen detallada, por eso no hay grandes descripciones, ni una naturaleza mimética. Lo que si hay es un interés por mostrar plásticamente las ideas más exageradas y bizarras de los Beatles, que se sirven de diversos trucos para impactar al espectador, como collages de diferentes imágenes fotográficas reales o la utilización de una gama cromática variopinta y totalmente antinaturalista, que dota a la película de una atmósfera psicodélica perfecta.

http://neokunst.wordpress.com/2013/04/09/cine-y-artistas-yellow-submarine-the-beatles/