Cine negro español por parte de un director falangista, José Antonio Nieves Conde, que juega con... es que si lo digo casi que hago un spoiler. Así que diré que un crimen y a partir de ahí retrocedemos en el tiempo para saber qué ha pasado entre el escritor de poco éxito Hugo Pascal (el mejicano Arturo de Córdova) y la artista de variedades Yvón (una gran Emma Penella). Por cierto, que estas chicas de revista, actrices, coristas y demás espectáculos ligeros, tal vez no tanto en los años 50, pero en el siglo XIX largo, hasta los años 20 al menos, tenían muy mala imagen en todo el mundo porque se presuponía que eran muy fáciles o directamente se medioprostituían, lo cual no quita que precisamente por este motivo infinidad de señores pretendieran llevárselas al huerto, al parecer con bastante éxito según "La Historia de las Mujeres" de B. S. Andersson y J. P. Zinsser.

Pero volviendo a "Los peces rojos", las expectativas en mi casa eran tan altas y la insistencia en verla tan apremiantes que por fuerza la cosa tenía que acabar en decepción. No obstante, no es una mala película a pesar de tener un fallo más bien gordo que encima se podía haber solucionado con notable facilidad. Digamos que tiene un misterio del que sospechas desde el minuto uno. Luego más adelante incurre en una serie de torpezas difíciles de explicar (SPOILER). En mi opinión hubiera quedado muchísimo mejor que todo el principio hubiese sido contado para crear más impacto con el truco final. Aún así la historia se sostiene aunque a mí de todas maneras lo que más me ha gustado, además de la mirada caleidoscópica sobre una persona, dos o tres diálogos, en especial el que tiene Hugo con el editor, buenísimo, en el que se ataca el neorrealismo y demás.