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Acción. Ciencia ficción. Terror. Comedia. Fantástico ¿Todo está perdido? Fin (Ian Ziering) desbloquea el poder de viajar en el tiempo de los Sharknados para salvar al mundo y resucitar a su familia. En su viaje, Fin luchará contra nazis, dinosaurios, caballeros e incluso se dará una vuelta en el Arca de Noé. Esta vez lo importante no es cómo detener a los sharknados sino cuándo. Sexta entrega de la franquicia "Sharknado". (FILMAFFINITY)
14 de octubre de 2018
1 de 1 usuarios han encontrado esta crítica útil
Pues con esta película, salvo sorpresa mayúscula que nos den en el futuro, ponemos punto final a una franquicia que ha devuelto a los escualos a la actualidad cinematográfica desde que los pusiera de moda Steven Spielberg en los setenta. Por supuesto, está a años luz de su hermana, o mejor dicho, su tía millonaria de "Tiburón" (1975 a 1987) pero bueno, tampoco me esperaba otra cosa, dado al género B o Z, según se mire, a la que pertenece. Han sido en total seis entregas en seis años, del 2013 al 2018, y lo cierto es que su nivel ha sido bastante bajo, no os voy a engañar. En cualquier caso, si en la anterior, "Sharknado 5" (2017), nuestros amigos recorrían medio mundo para enfrentarse con tornados de tiburones, en la presente lo que hacen es viajar en el tiempo con el mismo fin: Era de los Dinosaurios, Edad Media, Revolución Americana, el salvaje oeste, años sesenta y algunas sorpresillas más.

Todo esto está muy bien pero "El último Sharknado: Ya era hora" resulta más bien desastrosa. La saga nunca ha sido muy lógica aún dentro de este disparatado universo, pero es que aquí Anthony C. Ferrante perpetra un despropósito en el que las cosas no tienen ningún sentido, empezando porque nos quieren convencer de que personajes que hemos visto morir, ahora nos dicen que no, que han viajado en el tiempo. Ferrante se desmelena hasta llegar a un punto cumbre de lo kitsch mientras que los efectos especiales/momentos de acción son tan malos que te de la risa. Dentro de lo bueno, que es poca cosa, hay alguna situación simpática y la aparición de Tori Spelling, compañera de Ian Ziering en la mítica "Sensación de vivir" (1990-2002), es entrañable. De todos modos lo que más me ha gustado es Cassandra Scerbo, que mejora el look de la precedente con esas botas altas y negras.
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