Extraordinaria película que combina a la perfección varios géneros como son el fantástico, la comedia, el drama y la intriga. El guión es muy original y ganó el Oscar con todo merecimiento. Cuenta la historia de una pareja, Moore y Swayze, que después de salir de la ópera es asaltada por un delincuente que mata de un disparo a Swayze. Sin embargo, su fantasma está condenado a vagar por el mundo hasta que no desvele los motivos de su asesinato. Para ello contará con la ayuda de una farsante pitonisa que curiosamente es la única que puede oírle. Además de la colaboración de un fantasma malhumorado que le enseñará una serie de trucos muy útiles para desenvolverse mejor en su nuevo estado.

Una de las escenas más recordadas de la película es aquella en la que los protagonistas se besan mientras suena el tema interpretado por The Righteous Brothers "Unchained Melody" una hermosa canción de los años cincuenta que volvió a ponerse de moda a raíz del éxito del filme. El trío protagonista realizó un excelente trabajo interpretativo, sobre todo, Whoopi Goldberg cuya gracia y desparpajo fueron recompensados con el Oscar. Demi Moore también consigue uno de sus mejores trabajos con una actuación memorable y emocionante. El que más flojea es el malogrado Patrick Swayze, su papel es el más complicado porque es difícil resultar creíble con la cantidad de cosas extraordinarias que le pasan. De todas formas su trabajo no desentona. Respecto a los secundarios, destaca Tony Goldwyn, un actor que gracias a la popularidad del film continuó su carrera con relativo éxito. Rick Avilés y el simpático Vincent Schiavelli también se lucen en sus breves actuaciones.

En definitiva una historia inolvidable que obtuvo unas excelentes críticas, llegó a recibir cinco nominaciones al Oscar entre ellos al de mejor película del año, así como un descomunal éxito taquillero. Con el paso del tiempo algunos han considerado que la cinta es bastante ñoña y almibarada. Yo la vi en su momento y la he ido revisando a lo largo de estos años y me sigue pareciendo muy buena, no ha perdido ni un ápice de emoción ni siquiera los imaginativos efectos visuales que han envejecido con dignidad. Y reivindico su emotivo final que supone la guinda perfecta para una película redonda.