Menuda manera de arrancar una carrera cinematográfica. Fue a crear una de sus primeras películas y acabó haciendo una obra maestra. Gran director, grandes interpretaciones, y lo más importante, gran gran historia.
Desde el inicio hasta el final, con esa música espeluznante mantiene al espectador agarrado a la butaca temiendo que en cualquier momento aparezca el enorme monstruo emergiendo del mar y devorando a uno de los personajes. La primera vez que ves esta película es tan inquietante, que la angustia te recorre el cuerpo, ¿cuando aparecerá, a quién se comerá, como lo hará?
El ritmo narrativo es tratado por Spielberg de manera casi quirúrgica, hasta llegar al punto en que no sabes en que momento va a aparecer el enorme escualo.
Si el cine de terror merece tener un icono o símbolo que lo identifique ese es TIBURÓN, una auténtica obra maestra con escenas memorables y difíciles de olvidar. Que esta película se haya creado en 1975 es casi increíble, por la tremenda calidad de algunas de sus escenas de terror, pero esto es comprensible debido al gran maestro de ceremonias que la dirige (Spielberg). De pequeño era mi película favorita, y de mayor (ahora tengo 20 años) es una de las indispensables, cada vez que se me presenta la oportunidad, la veo. He visto muchas, pero para mí es una de las películas que más miedo me da. La recomiendo, es más, si no la ha visto véala y agradezcaselo a Spielberg.