Esta serie marca un antes y un después en la vida de cualquier persona, nos embarca en un mundo que jamás pudimos imaginar ni recrear ni soñar. Todo ser humano es apto para ver esta serie y quedar prendado de ella sin ninguna duda o posibilidad de salvación.

Las situaciones que crea están cargadas de intriga, tristeza, indecisión, alegría, empatía con los personajes hasta un punto increíble, amor y un montón de diferentes sensaciones que cargan cada minuto de esta serie.

A medida que vas viendo la serie, te das cuenta de que es practicamente imposible adivinar lo que esta por venir.

Supongo que todo el mundo conoce la sensación de, tras haber visto un capítulo, no poder dejar de ver el siguiente por saber qué pasará. Pues bien, con LOST, esta sensación se multiplica exponencialmente. Se podría decir que ver el capítulo siguiente es algo que realmente necesitas para dejar de pensar en ello, con lo cual nunca podrás dejar de ver otro y otro y otro... Cuando se acaban las 6 temporadas te das cuenta de que lo has visto muy rapido, tienes una sensación de vacío increíble. Algunos, entre los que me cuento, dicen que es como perder un amigo.

La ciencia y la magia siempre están en disputa en esta serie, cosa que la hace muy atractiva porque complicadamente llega a ganar una de las dos de forma absoluta y resolutiva... hasta el final final.

Y otro de los puntos fuertes de la serie: los personajes. Bien actuados, bien caracterizados, cada uno de ellos tiene personalidad, lo que hacen que la serie sea una combinación de situaciones y conflictos en continuo cambio e impredecible desenlace. No hago mención a cada uno de ellos por no extenderme.

En cuanto al final, es cierto que no es increíblemente bueno, pero le da un cierre a una serie muy compleja, difícil de cerra, le da un final, un desenlace para que a todos nos quede en la memoria como ``algo bueno que acabó y acabó bien´´.

Aunque podría hablar durante horas de esta serie, voy a parar aquí para no cansar.