No diré que Glass es mala, pero desde luego no es buena. Tiene muchos fallos, se nota que Shyamalan quería provocar ciertas escenas, ciertos encuentros, y quedan torpes, forzados, poco plausibles. También es lenta, tarda demasiado en entrar en materia y sobre todo tarda demasiado en exprimir a Don Cristal, que personalmente llevaba 19 años esperando para verlo. Es un personaje que me cautivó en cine siendo un adolescente y no puedo estar más decepcionado, porque a todo lo anterior debo añadir lo más grave: una falta de inspiración absoluta, es una película que no tiene ni un sólo diálogo memorable.

La película ahonda en lo sobrenatural, en si es posible, con más profundidad que las anteriores, eso es interesante. James McAvoy está genial y el final tiene un giro muy bueno. Eso es lo más destacable.

El final también tiene un par de cagadas, que comentaré en spoiler, pero en resumen, de tanto forzar situaciones, Glass termina pagando el alto precio de la suspensión de incredulidad. Desde luego no está a la altura de las anteriores.