Digamos que la película en sí no es horrible, pero únicamente si la catalogamos como película para una media de espectadores de entre 10 y 16 años.
Pensaba que iba a ser algo mucho más serio, o más creíble y sin tantos fallos escénicos. No es concebilble en ningún momento que estemos verdaderamente en el S.XII (excepto por vestimentas y caballos), supongo que será por el toque infantil y predecible que tiene.
Por otro lado no deja de ser una película entretenida, pero claro está, como muchas otras del montón.