La conducta entre señores y criados, pronto quiere poder y soborna, es deshonesto y necesita lecciones que ni el padre ni el colegio le podrán dar, tiene que verse obligado a comprender que las calumnias no son honradas y para ello debe dejar de ser un privilegiado, un niño cuyo padre es una máquina de hacer dinero y sin madre tiene un porvenir complicado, un accidente, una oportunidad de ser un futuro ciudadano ejemplar, ya no vale eso de mi padre...

El encuentro, el rescate, la sirena de caracola sustituye a la del trasantlántico y el pescadito se ve involucrado en una nueva temporada de pesca, tiene que pensar como un bacalao y vestirse con lana que pica, y que pronto se convertirá en la propia piel, los problemas del mocoso hacen que permanezca exaltado, pero tiene que ganarse el sueldo entre anécdotas de pescadores, las obligaciones deben superar al genio, el barcucho de mala muerte y la tripulación harán que se sienta bien por dentro, increíble monólogo sobre lo necesario para sentirse feliz y realizado.

Una película agradecida, que permite conocer el océano, escenas auténticas de pesca combinadas con competencia profesional, diálogos de besugos, el niño aprende el arte de la pesca, pero además aprende cómo se vive en el cielo, entre trampas y disputas se consigue vivir a tope, pero toca regresar.

Secuencias rodadas por auténticos profesionales salvo la trágica que es irreal y tramposa, pero necesaria para completar el adiestramiento, va implantando la duda en la vuelta, hay que volver a casa, la magia se desborda al combinar todos los elementos, el rodaballo, el cebo, la navaja, el candelabro y hasta el maleficio, ese extraño instrumento musical del que sale una sencilla melodía pegadiza por días, una aventura con viejos pescadores, consigue ser alguien, sentirse útil, tener camaradas, ser un gran chico, el deseo del relebo, o incluso de tener un asiento en la barca celestial, por encima de todo, "Capitanes intrépidos" es un grandísimo homenaje a todos los que descendieron al fondo del mar con sus barcos.