Vergüenza ajena me ha llegado a dar esta película.

La verdad que no me interesó cuando se estrenó y la vi ya en el 2008. La película es un engaño clarísimo al potencial espectador intentando hacerla más comercial a través de efectos especiales y la apariencia de fábula. La verdad es que es una historia maniquea sobre la guerra civil que no viene a cuento, y que llena el 80% de la película. Se presenta al capitán franquista como auténtico psicópata sádico y descerebrado (y no es que no haya por desgracia soldados así), pero se nos muestra así en cada escena para que no se nos olvide que es muy malo maloso. Los soldados franquistas no vigilan ni ven al enemigo que parece que siempre tienen a 100 metros.

Que conste que pienso esto desde la más pura objetividad del que se ha aburrido muchísimo viendo este rollo, mis ideas son mucho más cercanas a la izquierda y desde luego soy republicano, pero aún así siempre he defendido que el cine como medio de comunicación de masas no debe estar al servicio del maniqueo ni comercial ni mucho menos político. Si se quiere hacer una película política y partidista no pasa nada, las hay a montones y son un subgénero dentro del cine como lo pueda ser el terror, drama, comedia romántica, ... y más ... pero no se debe engañar al espectador intentando meterla en la publicidad dentro del género fantástico, porque eso, señor del Toro, es una falta de respeto y honestidad profesional. Y más aún cuando el tratamiento es tan simplista y descarado.

Sólo espero cuando se hace una película política que la haga alguien un poquito más 'cultivado' y que no esté al servicio del gobierno de turno.

A los críticos que vitorearon esta película sólo para intentar vender demagogia política escondida bajo efectos especiales les recuerdo que un día nos juzgarán por este cine como juzgamos nosotros siempre a los americanos por intentar meternos su ideología y costumbres a partir de películas que están ya escritas de antemano por los lobbys.

Hablando ya de lo que es la película en sí, pues sólo se salvan los efectos especiales, que sin ser geniales, son de lo mejor que se puede ver en una película española, eso sí, están al servicio de sólo un 20% de la historia, que es una fábula aburrida, gore y simplona con final infantiloide de moralina barata.

Para colmo es una copia hasta en el título de "Dentro del Laberinto" con una joven Jennifer Connelly que actuaba mejor que la niña que han cogido para esta peliculeja.
También me recuerda una de las escenas del final con el fauno, la niña y su hermano pequeño a la canción de Mecano Hijo de la Luna.
Las escenas entre la fábula y la historieta de vaqueros, perdón makis-franquistas, se entremezclan sin mucho sentido. Ariadna Gil me parece penosa en las pocas películas que la he visto, no sé si es que tendré que verlas todas, siempre la misma cara y vocecilla que no entiendo lo que dice.

Vamos, película poco original y creada por encargo ideológico, mala combinación.