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Voto de Vivoleyendo:
7
Drama Nigel (Hugh Grant) y su mujer Fiona (Kristin Scott-Thomas) son un matrimonio británico de crucero para celebrar su séptimo aniversario de boda. A bordo conocen a la atractiva y deshinibida Mimi (Emmanuelle Seigner) y a su marido Oscar (Peter Coyote), un norteamericano que está inválido en una silla de ruedas. Nigel empieza a sentirse atraído por Mimi, y Oscar, que se da cuenta, le propone que intente seducirla, pero antes le cuenta cómo ... [+]
17 de agosto de 2008
27 de 30 usuarios han encontrado esta crítica útil
Polanski consiguió llevarme la madrugada pasada por su universo denso, inquieto y angustioso durante algo más de dos horas. Un universo cargado de erotismo, de pasión al límite, de una dualidad amor-odio malsana y estranguladora. Destapa las estructuras más básicas, primitivas, viscerales, incómodas y difíciles de abordar de las relaciones amorosas, nos lleva de paseo, un paseo a veces desagradable y cuesta arriba, pero siempre atrayente, por los altibajos del amor y de la pasión sexual, por la convivencia, por las represiones y las desinhibiciones, por las fantasías en su máxima expresión, por la rutina y la inercia, por la conformidad y la resignación a una situación que no satisface y que llega a lastimar, por las desavenencias y los desencuentros que se van pudriendo poco a poco hasta explotar, por la pérdida de la dignidad y del orgullo y de la autoestima, por las tendencias sadomasoquistas...
Todo un paseo, en el que no salimos inmunes, por la inmensa complejidad de algo que, no por ser tan común y una de las mayores aspiraciones de la gran mayoría, tiene por qué ser algo sencillo: las relaciones de pareja.
Polanski elige las dos caras de la moneda. Por un lado, una pareja en apariencia feliz y armoniosa, que celebran su séptimo aniversario de boda en un viaje que les ayude a renovar su amor. Nigel (Hugh Grant) es un hombre pragmático, sensato y equilibrado, y convive tranquilamente con su mujer, Fiona (Kristin Scott Thomas). En el viaje, se encuentran con la otra cara de la moneda. Mimi (una bellísima y sensual Emmanuelle Seigner), una bailarina explosiva, desgraciada y enigmática, casada con Oscar (Peter Coyote), que es parapléjico y también desgraciado, y cínico. La cara y la cruz se encontrarán y Nigel se irá sumergiendo, sin poder resistirse, en el obsesivo, erótico e inquietante pasado de ese extraño matrimonio, a través de los relatos de un nostálgico Oscar que ya sólo vive de sus recuerdos y que no tiene en el mundo a nadie más que a su bella mujer. No pudiendo satisfacerla sexualmente, pretende lanzar a Nigel a sus brazos, interesado morbosamente por ver cómo reacciona el decoroso y controlado marido ejemplar ante tanta sensualidad desbocada... Pero también es el único desahogo que tiene Oscar, y su única manera de seguir sintiéndose vivo. Recordar un tiempo que se marchó para siempre, y tratar de revivirlo a través de la única persona que le escucha (aunque sea de forma escandalizada y sintiendo repulsión a la vez que fascinación).
Navegamos por una narración que asciende por una ola de pasión para luego descender hasta un abismo siniestro y un círculo vicioso destructivo.
Sumergirse en semejante evocación de pasiones viscerales, algo tan ajeno a la sosegada vida de Nigel, perturba todo su interior y ello redundará en su relación con Fiona...
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
Vivoleyendo
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