La verdad es que tras ver esta peculiar película (por llamarla de alguna manera), uno se siente como la decripción que los prospectos de los fármacos hacen de los posibles efectos adversos del medicamento en el paciente, "malestar general", "desorientación", "nauseas", etc etc. Pues bueno, no hubiera estado mal que el film advirtiera en lo títulos de crédito iniciales, del malestar general que puede provocar en el espectador una historia tan enfermiza y antipática.

No dudo que a Buñuel le hubiera gustado, y que la etiqueta de surrealismo no le va mal, el problema es que más allá de lo audaz y original de su planteamiento y situaciones cotidianas, el desarrollo del mismo no interesa demasiado, las gotas de humor son demasiado escasas, y sobre todo no lleva a ningún lado, no tanto la historia en si, que lo acepto, como una posible reflexión ulterior de lo ocurrido, que en mi caso, no se produce por el desinterés y hastío de unos personajes basicamente antipáticos.

Resumiendo, no entré, la apruebo por original y audaz, y porque es tan llamativo lo que ves que no acaba de aburrir, pero al final todo parece hueco, vacío.