Aunque es un buen punto inicial de los MX para lanzar "astros" (criollos seudo cholos pseudo green_go_home) iconos propios de una cultura popular floreciente, es muy cuestionable la forma de llegar a ello.
La cinta es bastante entretenida, hasta entrañable, pero para conseguir estas sensaciones y alcanzar su objetivo, se sacrifica a todo el elenco, todos dan un paso hacia atrás cuando se trata infante y Evita, así sus diálogos sobreabundan su mundo perfecto, pobre, feliz, miserable a veces pero perfecto al fin, siempre muy bien peinadito, siempre con su potente y salvajemente exquisita voz, siempre Pedro, siempre Pepe, siempre El Toro.