Media votos
5,2
Votos
996
Críticas
996
Listas
4
Recomendaciones
- Sus votaciones a categorías
- Contacto
- Sus redes sociales
-
Compartir su perfil
Voto de ddarko_1980:
9
7,0
10.910
Romance. Drama
Don es un vendedor de casas que en su tiempo libre presta servicio voluntario en el Teléfono de la Esperanza. A Ann, que trabaja en una tienda de artículos de fotografía y vídeos, su novio le ha dicho que ya no la quiere y que desea cortar la relación. Para intentar recuperarlo, ella graba una cinta de vídeo donde le cuenta cosas que nunca le dijo. Las vidas de Don y de Ann, al cruzarse, experimentan cambios fundamentales. (FILMAFFINITY) [+]
3 de noviembre de 2009
2 de 5 usuarios han encontrado esta crítica útil
Ann (Lili Taylor) se siento sola en una ciudad que no le gusta, para colmo su novio la abandona... telefónicamente, Don (Andrew McCarthy) también se siente sólo, vende casas y suple su soledad ayudando a otros como voluntario en el teléfono de la esperanza. A su alrededor también hay otras almas en pena, como Paul (Alexis Arquette) vecino de Ann y enamorado "secretamente" de ella, Diane (Debi Mazar), transexual que añora su ya inexistente pene o Frank (Seymour Cassel), padre de Don y que tan sólo ansía ser abrazado...
Coixet escribe y dirige esta poética película que habla no sólo de la soledad, sino de la necesidad ya no de ser amado, sino de sentir en el más amplio sentido de la palabra, y lo realiza magistralmente a través de un prodigioso guión que consigue transmitirlo a través de situaciones que van desde lo más cotidiano (la charla en la lavandería) hasta algo más trasgresor (la historia de Diane), tocando la fibra sensible del espectador gracias a unos bellos diálogos acompañados de unas interpretaciones igualmente destacables.
McCarthy realiza la interpretación más creíble de su carrera, del mismo modo que el resto del reparto (con Lili Taylor a la cabeza) realizan unos trabajos excepcionales, pero claro, es que Coixet les pone en bandeja unos personajes llenos de matices y con los que poder lucirse. Ello incluso se puede aplicar a los personajes más secundarios, como la enfermera grosera o la mujer que llora en el supermercado porque no tienen el helado que le gusta, lo que provoca asombro en Ann, hasta que a ella también le pasa. Y es que una de las grandes bazas de la película es su creación de algo especial, emotivo y esperanzador.
Coixet escribe y dirige esta poética película que habla no sólo de la soledad, sino de la necesidad ya no de ser amado, sino de sentir en el más amplio sentido de la palabra, y lo realiza magistralmente a través de un prodigioso guión que consigue transmitirlo a través de situaciones que van desde lo más cotidiano (la charla en la lavandería) hasta algo más trasgresor (la historia de Diane), tocando la fibra sensible del espectador gracias a unos bellos diálogos acompañados de unas interpretaciones igualmente destacables.
McCarthy realiza la interpretación más creíble de su carrera, del mismo modo que el resto del reparto (con Lili Taylor a la cabeza) realizan unos trabajos excepcionales, pero claro, es que Coixet les pone en bandeja unos personajes llenos de matices y con los que poder lucirse. Ello incluso se puede aplicar a los personajes más secundarios, como la enfermera grosera o la mujer que llora en el supermercado porque no tienen el helado que le gusta, lo que provoca asombro en Ann, hasta que a ella también le pasa. Y es que una de las grandes bazas de la película es su creación de algo especial, emotivo y esperanzador.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
Ver todo
spoiler:
La película cuenta con algunas escenas características del cine de Coixet, entre ellas la que tiene lugar en la lavandería y que marca a los dos protagonistas, u otras igualmente interesantes, Ann ingiriendo laca de uñas y que acaba con ella en el hospital, la primera conversación entre ella y Don (vía teléfono de la esperanza) o el abrazo de ella a Frank a la salida del hospital en el que se haya Don. De poner alguna pega sería la escena del intento de suicidio por lo ligeramente titubeante de la dirección, pero ello es un mal menor para una película que resulta definitivamente maravillosa.