Alien: Covenant

Solo tengo una pregunta, ¿por qué?. Alien: el octavo pasajero se ha convertido en una película muy conocida mundialmente y considerada de culto por muchos fans del género, hasta el punto de colaborar con otras conocidas sagas como Predator y tener su propio videojuego. Pero esta película arrasa con todo el prestigio de la saga, bueno, esta y las tres anteriores.

NO tiene ningún sentido ni sigue con las entregas originales, la película tiene cosas que pasan a ser secundaria de repente y otras que no importan nada de repente tienen que realizarse de inmediato y lo peor es que lo que viene siendo los aliens ni siquiera importan.

Paso a la zona de spoilers, para especificar más.

Despues de que en Prometheus los Alien (las criaturas con las que Scott originó fanáticos en los años 70) tuvieran poca importancia o protagonismo, en esta entrega vuelven a tener protagonismo en la generación de un terror sicodélico que te deja con tensión en los últimos 2 tercios de la película.
Es cierto que el comienzo se hace algo reflexivo y aburrido, haciendo demasiado larga la espera hasta la llegada al planeta (y por consecuencia a la acción), pero la espera merece la pena. La película, a pesar de tener el climax en la mitad de la misma, acaba de una manera espectacular con escenas de acción en la nave que recuerdan a Alien el octavo pasajero. Fassbender vuelve a tener un papel destacable rodeado de personajes secundarios que cumplen su papel a la perfección.
La verdad es que es sin duda mi película favorita de la saga, a pesar de no ser la más mítica.

"Alien (Covenant)” es: decepcionante como película, muy decepcionante como sci-fi de Ridley Scott, y tremendamente decepcionante como entrega de la saga "Alien". Aunque, como devoto del Xenomorfo, siempre me funcionará como guilty pleasure.
En una primera toma de contacto admito que "Prometheus" (Ridley Scott, 2012) pudo descolocar, y hasta decepcionar. Pero fue más por la falsa idea que nos habíamos hecho de ella durante su concepción que por ser una mala película, que no lo era. Esperábamos una cinta cánon de “Alien", pero el encontrar algo tan diferente nos desarmó de tal forma que nuestra primera necesidad fue odiar. Luego ya, con los visionados, descubres lo fascinante que puede llegar a resultar y el altísimo nivel que atesora la obra en todos sus aspectos.
En "Alien (Covenant)" Ridley Scott vuelve a darnos gato por liebre, pero ya no hay justificación. La cinta nace, ahora sí que sí, bajo el pretexto de ser cánon "Alien", pero al final acaba resultando más cánon "Prometheus" que "Alien". Incluso es más cánon “Depredador” (John McTiernan, 1987) que "Alien". Luego hay determinadas decisiones de guion que hacen que "Alien (Covenant)" más parezca una exploit cachonda y absurda a lo Robert Rodríguez que una sci-fi refinada a lo Ridley Scott. De verdad, los tripulantes de la Covenant, ni me atrevo a llamarlos científicos, no pueden ser más estupidos. Creo que había más profesionalidad en la TIA de Mortadelo y Filemón. Hay escenas que son, literalmente, de traca.
“Alien (Covenant)” podría definirse como una película compuesta por un prólogo de ciento cinco insípidos minutos que más que homenajear a Alien parece que rinden pleitesía a Depredador, y un correcto y breve clímax final que sabe a muy poco. Mientras que en “Prometheus” Ridley Scott trataba de darle origen al Xenomorfo innovando, en “Alien (Covenant)” sigue ese proceso pero sin inventar absolutamente nada. La película es muy de carril, con un desarrollo plano y carente de la mayoría de los elementos que hicieron triunfar “Alien, el octavo pasajero” (1979). En el film resulta decepcionante hasta su (en teoría) protagonista. Si la teniente Ripley coge por banda a Katherine Waterston no quedan ni los dientes. Vale que seguramente no sea culpa suya del todo, los guionistas la convierten en una secundaria más durante gran parte del metraje cuando, durante toda la campaña promocional, nos la habían vendido como gran protagonista. Realmente en “Alien (Covenant)” el gran protagonista, y salvador del film, es Michael Fassbender. Este se multiplica, nunca mejor dicho, para salvar la cinta de la quema total. Las pocas sorpresas que nos depara la película nos las sirven en bandeja tanto Walter como David, y este último quizás merezca un spin-off.
En resumidas cuentas, “Alien (Covenant)” no es mala película, pero siendo sincero esperaba mucho más de ella. Yo siempre he defendido que durante la última década lo único que le ha salido bien a Ridley Scott han sido sus acercamientos a la sci-fi, pero que se ande con ojo no vaya a ser que eso también le empiece a fallar, y “Alien (Covenant)” me invita a pensarlo.

Hasta el desembarco de los colonos la película es impecable. Cuando aparece el androide David la cosa se va saliendo de madre. Alien covenant tiene un problema irresoluble, estructural: Su formato. He estado esperando una historia como esta (slasher de alto presupuesto con nave colonizadora espacial en planeta repleto de aliens) desde que James Cameron me deslumbró en el 86 con solo 12 añitos. Y esta historia es demasiado grande para explicarla en una película de poco más de 2 horas en formato blockbuster. A ver si nos enteramos, Sr. Scott, que los aliens han de ser el aderezo, la salsa de la historia. Pero que lo más importante no son los aliens sinó la historia: la colonización de un planeta hostil. Y esto no se puede despachar en 2 horas, una vez más, igual que no se puede hechar un polvo en 1 minuto. Si vas a hacer una película de 2 horas, al menos no pretendas comprimir toda la exploración del planeta alien en ellas, tómate la historia con calma y aprende la lección de "el imperio contraataca" para reducir una película a solo un capítulo de una historia mas larga i compleja. En fin, ¿Alguien se apunta a un remake en formato serie producido por Netflix o HBO? Westworld ha dejado el listón muy alto. Toca renovarse o morir.

Cuando Ridley Scott era un director serio, hacía una película, la estrenaba, le salía bien, mal o regular, y a otra cosa: se iba a hacer algo distinto. Así que cuando hizo Alien, se olvidó de la saga, perdió el control de la misma, y otros –empezando por el señor Cameron- se encargaron de continuarla, ir creando la mitología, y de paso de irle bajando el nivel. Pero se ve que hace unos años el amigo Ridley decidió volver a coquetear con el tema: y le salió Prometheus: “no... no es una película de la serie Alien”, “se desarrolla en el mismo universo pero no es una continuación...”, “comparte cadenas de ADN –por así decir- con Alien,...” ¡Tonterías! Era una precuela en toda regla.

Pero como tuvo bastante éxito, el amigo Ridley decidió no parar ahí, dejarlo estar. ¡No!, planteó la secuela definitiva de Prometheus que sería la precuela definitiva de Alien. ¿por qué definitiva? Porque en lugar de ser una película puente entre ambas, sería una trilogía de películas que hicieran de puente. Ahí es nada: mientras el cuerpo aguante y la gente pase por taquilla...

La parte positiva es que la gran cantidad de preguntas sin respuesta que se planteaban en Prometheus pueden ser respondidas en esta secuela-precuela-extendida. El gran inconveniente de Alien Covenant es que es una película puente, y eso se le nota, y mucho. Le pesa.

Tenemos nueva nave (la Covenant), tenemos nueva tripulación (esta vez más numerosa, claro, si sólo hay 7 pasajeros tienes que ir cargándotelos con cuentagotas o te quedas sin película muy rápido), tenemos nueva misión (transportar miles de colonos en hibernación y embriones criogenizados) para colonizar otro planeta,...

Lo que pasa es que –a diferencia de Prometheus- en donde había cosas nuevas (luego le saldría peor o mejor, pero había elementos e ideas nuevas) aquí no es así, aquí todo suena ya ha visto antes.

Empezando por el principio: Fassbender haciendo de sintético una vez más, de hecho la primera escena es una especie de prólogo anterior incluso a Prometheus en el que se nos muestra a Weyland cuando el androide David cobra vida: ¿os acordáis que había dicho que era una película puente? Bueno, pues eso, tiene que enlazar con las dos, con Prometheus por un extremo pero con Alien por el otro.

¿Y como enlaza con Alien?, pues reuniendo todos y cada uno de los elementos que tenías en Alien y desarrollando la historia en el orden previsible en el que piensas que deben ocurrir las cosas: la tripulación en hibernación es despertada, hay una seña misteriosa proveniente de un planeta misterioso que hasta ahora no había visto nadie,... ¡venga!¡vamos! ¿qué nos cuesta? Damos un rodeo y bajamos a echar un vistazo...

Y los xenomorfos, claro, que empiezan a hacer de las suyas, y la tripulación, que van cayendo uno a uno como moscas... Los xenomorfos ya no son tan “raros” como los de Prometheus,... si, ya si que empezamos a ver al “bicho” como lo conocíamos.... joder, si incluso aparece nuestro viejo conocido el abrazacaras como en la primera de la serie. Eso sí, ahora no sólo hay que preocuparse porque el bicho te reviente el pecho para salir... ya puede salir por donde sea.

Si en Alien el amigo Scott metió elementos novedosos en la ciencia ficción (la nave no estaba inmaculada, como el acero inoxidable, no; estaba roñosa, y sucia, era opscura y había grasa. La tripulación no eran todos cadetes espaciales honorables con el uniforme limpio y siempre dispuestos, no: estos tíos eran camioneros espaciales, y al de mantenimiento no le hacía gracia tener que bajar a mancharse las manos arreglando no se que le hubiese ordenado el capitán,..) pues en Alien Covenant también intenta innovar en algunas cosas: por ejemplo es la primera vez que veo en una peli ce ciencia ficción de las grandes a dos personajes que son gays, y además son pareja, abiertamente.

Pero las innovaciones son poca cosa. La serie de homenajes/autoplagios llega hasta el extremo de que nuevamente la heroína es una mujer, como la teniente Ripley. Una mujer que no es la capitana, pero que es la que tiene que acabar haciéndose cargo de la situación, como la teniente Ripley. Bueno como Ripley no hay ninguna, pero vamos que Daniels lo intenta...

Bueno, pero al final, ¿es buena o es mala película? Pues depende. Si odiaste Prometheus porque no estaba a la altura de tus expectativas, esta te va a decepcionar aún más. Si odiaste Prometheus porque se apartaba demasiado del molde “película-de-Alien” esta la verdad es que se acerca más al canon.

Alien Covenant no es peor que Prometheus, ni peor que alguna de las películas de la saga original... Porque mira que hay alguna mala... Es una película muy digna, muy entretenida y muy bien hecha en cuanto a efectos, fotografía y demás. Eso si, ni de coña da miedo ni acojona.

Pero los acontecimientos de la historia se desarrollan como te esperas y en el orden en que te los esperas. Eso si, todo va muy deprisa, tanto que cuesta bastante mantener la verosimilitud: ¿cuánto tarda en desarrollarse el alien y salir ya crecidito del cuerpo desde que te infectan unas simples esporas? ¿horas?... Todo suena ha ya visto (porque de hecho ya lo has visto antes) no hay sorpresas,... y la única sorpresa que hay, el giro sorprendente de guión, te lo ves venir tan de lejos y con tanta antelación que pierde todo su efecto.

En fin que es una película que tiene todo lo que cabría esperar que debe tener una película de la serie Alien, y todo lo que cabría esperar de una película de la serie Prometheus, pero aún así...

Amigo Ridley, dedícate a proyectos distintos, innova, que entonces es cuando te salen grandes películas (o regulares o malas, pero también peliculones) y no insistas más en lo mismo... Y por favor ¡mantente alejado de Blade Runner 2049 todo lo que sea posible!

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