Vivir su vida

Como un salmón, remontando río arriba, en contra de todos los elementos, Godard aparece en escena con una visión del cine impensable hasta el momento.
Una marca intelectual caracterizan sus Films donde se aúnan literatura e imágenes como soporte teórico de lo que se quiere expresar, y es justamente en "Vivir su vida" donde las palabras son objeto de reflexión acerca de su validez a la hora de expresar sentimientos o emociones... Es una maravilla escuchar la escena 10 donde Nana y Brice Parain reflexionan al respecto.
Los entendidos dicen que la Nouvelle Vague rompe con las convenciones expresivas que se conocen hasta el momento y es tal vez Godard el director mas representativo en este campo, pues sus recursos estilísticos nos aproximan la turbadora belleza de Anna Karina quien juega con nosotros, nos mira a los ojos como nadie nos había mirado a través de la pantalla, rompiendo las reglas, transgrediendo lo habitual, provocando admiración en una prostituta que tan solo elije alejarse de sus cadenas. Además, la continuidad se fragmenta haciéndonos reflexionar acerca de la realidad y la ficción; la música y el sonido en general adquieren un nuevo significado: que los silencios...
Sus compañeros de vieja en la cresta de la ola nos son ajenos. Otro de los mitificados directores franceses, François Truffaut, esta presente, como el cine en general, en alguna de las escenas finales: Jules et Jim
En definitiva, un film imprescindible e indiscutible.

Godard tiene una filmografía con 77 títulos (según filmaffinity) de las cuales yo vi tan solo cuatro. Ninguna me gustó totalmente. Especialmente no me gustaron ni 'El desprecio' ni 'Dos o tres cosas que yo se de ella' a tal punto que no pude terminar de verlas pese a que suelo ser paciente con las películas; les doy su tiempo.
A Godard se lo ubica dentro de la corriente de la Nueva ola (Nouvelle vague) junto a Chabrol, Resnais, Rivette, Rohmer y algún otro que no recuerdo. Vi muchas de Chabrol y todas me gustaron; algunas me parecieron sublimes (La bestia debe morir; Gracias por el chocolate; En el corazón de la mentira). Las 4 o 5 que vi de Rohmer también me gustaron (Especialmente 'La rodilla de Clara') aunque son muy habladas y con poca acción, pero con diálogos o tramas que me resultaron interesantes aunque en el balance final Rohmer no está entre mis preferidos.
Esta película es distinta a lo que yo estoy acostumbrado a ver. No tiene ni un ritmo ni un argumento usual. Es muy hablada y un tanto lenta. Está dividida en doce breves historias bajo un hilo común. En ciertas partes muestra realidades muy crudas que están muy bien señaladas; de una manera contundente. El argumento es simple: relatar la vida de una muchacha. Creo, no hay un argumento artificial, una trama inventada más o menos creíble o sutil. Se trata de filmar la vida cotidiana de una persona en su ambiente natural, cotidiano, en su ir y venir, en sus alegrías y angustias. Sobre el final de la trama, en el último capítulo, aumenta la tensión.
En anteúltimo capítulo hay una charla entre Anna Karina y un filósofo que no tiene desperdicio; los diálogos son exquisitos. En todo el filme hay frases exquisitas. Ya desde el inicio hay una cita de Montesquieu: "Hay que prestarse a los demás y darse a sí mismo" y en otro momento Anna dice: "Pero cuanto más se habla, menos significan las palabras". Por otra parte todas las actuaciones me resultaron logradas, especialmente la de Anna Karina y la del filósofo.
Esta película me quitó un poco la paciencia quizás porque no hay un argumento que exite, que lo mantenga a uno en vilo, por el contrario es un lento deambular. No quiero desanimar a nadie para que no la vea. Personalmente trato de ver todo cuanto hay. Godard, creo, bien merece nuestro esfuerzo y nuestra paciencia pues es un autor consagrado que puede gustar más o menos. En esta ocasión, creo, se deja ver. Mis 'almas gemelas' les dieron una media de 7,2 puntos. Yo le di seis puntos, un 'interesante'.

Un joven de 20 años con ganas de descubrir el arte del cine que se acerca por primera vez a Godard. Ve a un personaje evocador, y una historia lenta que crea un aura a su alrededor.

Tiene que haber algo más, intento buscar la belleza de los gestos, de las imágenes, los diálogos cotidianos... pero todavía tiene que haber algo más. Es eso o todavía soy demasiado novel para ver a Godard.

Pero se da el paso a los dos últimos actos y todo cobra sentido. Qué trascendental cada palabra. El paso de una vida a otra. Tanto con tan poco.

Que bueno que quede todo Godard por descubrir.

Tras la, para mi, discreta "Una mujer es una mujer", Godard repite con su mujer (valga la redundancia) Anna Karina, para esta vez ofrecer una importante muestra de su genio.

La película se mueve en dos vías, que podriamos considerar una de tipo argumental, y otra de carácter mas filosófico, la prostitución y las palabras.

Aquí se nos presenta a una mujer, interpretada por Anna Karina, que se sumerge en el mundo de la prostitución, abandonando una vida que parece estable, simplemente porque parece más cómodo, y esto lo hace sin traumas, sin la habitual bajada a los infiernos, ni las altas dosis de sordidez con que la prostitución suele ser presentada en el cine.

Por otro lado, las palabras, la comunicación, y todo un tratado representado por la conversación de la protagonista con un filósofo real , Brice Parain, en un cafe parisino, tremendamente interesante. La protagonista siente hastío de las palabras y se emociona viendo una película muda, o se enamora a traves de los pasajes de Poe, y de conversaciones en silencio

Rodeando todo esto, Godard, que en esta ocasión casi elimina las miradas a cámara, para ahora darle la espalda, que nos sigue mostrando lo cinéfilo que es, con un gran fragmento de "La pasión de Juana de Arco", o las colas para ver "Jules et Jim" en el cine, que sigue mostrando ese otro gran personaje de su cine que es París, que nos muetra un sensual y revolucinario baile para la época de su protagonista, y que finalmente, y casi sin venir a cuento, nos deja K.O. al final. Es en esto último es donde creo que estriba alguna de mis dudas respecto al film, los últimos minutos de la película parecen un corte atropellado que deja muchos interrogantes sobre quien es Nana, aunque no dudo de que sea esto exactamente lo que pretende Godard.

Película muy interesane, con una excelente fotografía, y de las obligatorias de ver para cualquiera que tenga cierta curiosidad cinéfila.

Pd: Sigo manteniento otra de las constantes en el cine de Godard, que es facil que te enamores de la protagonista, anna Karina, absolutamente espléndida.

A mí es que... creo que le voy a coger manía a esas películas que la crítica la ponen por las nubes, que son "Nouvelle vague", etc... porque para mí, son películas con pocos recursos que lo que hacen, lo hacen mal, pero dicen que son "Nouvelle vague" y quedan como dios. Pues no, a mí no me la cuelan.

Como siempre, la temática está muy bien (supongo que la crítica la pone por las nubes), pero como está hecho pues no. La crudeza de la situación de esta mujer, le hace llevar por un camino que no es que sea el mejor, pero es el único que hay. El final demasiado abrupto.