Declaración de guerra

A veces se da cuenta uno de que ya está mayorcito para ver pasteles de películas o intentos de retratar el mal de la enfermedad, aunque la mezclen con el toque artista, pero "Declaración de guerra" tiene compromiso, hay que enfrentarse con seguridad a lo que va a venir, el posible éxito se basa en transmitir estados emocionales en cada fase, preocupación, dedicación, la invasión de la enfermedad, "nuestro hijo no es normal", están acojonados, ansiosos, la historia es molesta, la neurología le declara la guerra a la naturaleza y sus anomalías.

Viene a ser cargar con el niño a cuestas, no hay casi detalles laborales ni sociales, pero sin embargo es complicado encontrar algo que reconozca la labor de la salud pública, un relato cercano a los pasillos, habitaciones y quirófanos; y luego tiene añadidos perturbadores, sabe transmitir, sabe jugar con la enfermedad, un lamento en un tipo de cine diferente a la hora de emitir sentimientos, porque busca hueco a la intimidad, al hogar y a la imaginación característica del cine francés.

Establece grandes lazos, tiene tiempo para todo lo que buscaba, mientras el niño está en manos de la medicina y la espera ahoga ante las espectativas, los personajes parecen ser realmente familia, tienen miedo de mil cosas, consigue que se expresen, sus motivos y palpitaciones, hay una unión entre radio y quimioterapia, mientras el niño está entre la vida y la muerte, deben quedarse con lo bueno para seguir luchando.

"Hay que aguantar Julieta", una historia de superación, un progreso hacia la victoria, un telefilm detallado, que se pone de acuerdo con la gravedad del tema, le cortan la tarjeta y no se cambian ni de ropa, se cogen algún pedo pero no toman drogas eh?, ni practican sexo, todo eso no se expone, se trata de la vida en el hospital, del protocolo de casos graves, curarse, apoyarlo, una historia que desarrolla a la pareja mientras aguantan entre habitaciones estériles y casas de padres, soluciones, diferentes etapas, mucha fuerza, vender el piso, aunque ya podrían haber vendido uno de los coches más feos que recuerdo en el cine...

No son personajes extremos ni se lleva a los extremos, se tienen que levantar, secuencias sonoras de calidad se interponen para amenizar puesto que apenas hay aportes del mundo exterior, no se trata de escandalizar ni de sensibilizar, se trata de enseñar, de advertir, de proteger, de plantearse porqué, de superarse sin elección, de poner buena cara. Se trata de enseñar el progreso hasta quedar firmemente destrozados, la debilidad y el aislamiento, rehacer vidas pero permanecer ligados, una partida a la DS, todo depende de lo que cerca que te toque el tema, el resultado varía enormemente.

Hace poco vi este filme dirigido y escrito (junto con Jérémie Elkaim) por Valérie Donzelli. Además es protagonizado por los dos actores, que son pareja. Similar al caso de Polisse donde la actriz, dirige y escribe el guión del filme. Estas chicas francesas son muy precoces y versátiles.

La película cuenta la historia de Romeo y Julieta (jeje), y de su hijo Adam. Los nombres nos pueden parecer chistosos, pero la película es un retrato bastante intimista de una relación que se enfrenta desde muy temprano a una gran calamidad. En este recorrido somos testigos de todos los problemas que tiene la pareja con la enfermedad de su pequeño hijo, como tienen que sacrificar muchas cosas en su vida, de su juventud aún presente. De cómo tratan de afrontar de la mejor forma los golpes de la vida, con el amor que se tienen. Pero incluso el amor se cansa en determinado momento, y sólo el tiempo y las experiencias compartidas, pondrán a prueba la firmeza de sus lazos.

La película no es excelente, y tampoco clasifica a mi parecer como joya, ya que tiene algunos problemas y algunos elementos no son muy bien manejados, justificados teniendo en cuenta la falta de experiencia en la dirección de Donzelli, pero de todas formas hay algo que no puedo negar, y es que la película tiene encanto. Y esto es en gran parte, labor de sus dos protagonistas, que hacen interpretaciones notables y naturales. No pude evitar relacionarla un poco con 50/50, por el tema de la enfermedad, y la siempre presente presencia del fantasma de la muerte en ambos filmes. E igualmente en ambas, se trata de afrontar esos fantasmas, con positivismo y la comedia, en 50/50 el toque de humor era en gran parte labor del mejor amigo, y en Declaración de Guerra, es desde los mismos personajes que enfrentan y sufren el dolor que su pequeño hijo atraviesa.

En síntesis, una película muy simpática y encantadora, me gustó. Recomendada para los que quieran ver una película real de amor y dolor.

Basándose en su propia experiencia, la directora y actriz Valérie Donzelli (una mezcla entre Samantha Villar y Manuela Velasco) nos entrega uno de los mejores dramas del 2011, y deja clara la buena salud del cine francés actual (El niño de la bicicleta, Intocable...). La joven directora nos regala una historia durísima sobre el trago que pasan unos padres noveles al ver que a su hijo de dos años se le diagnóstica un tumor cerebral. Hasta aquí parece que vayamos a ver un telefilm más, pero la manera en que los padres viven la dura enfermedad de su hijo es tratada de manera muy diferente, dejando a un lado toda la pornografía típica en estas historias.

Sin duda hay que alabar este hecho, ya que imagino que traerá muchas consecuencias debido a que habrá gente que no lo entienda, pero yo creo que es lo que hace diferente a esta cinta, una cinta que hace que te diviertas, pero que a la vez estés sufriendo por esa tragedia que vive la familia. Además la cinta es muy amena, ya que su duración hace que no hayan escenas alargadas o que sobren.

En definitiva, una cinta que roza la maestría, y que si eres un poco sensible hará que al final rompas a llorar. Obligada.

Lo mejor: El guión, los actores, el ritmo...
Lo peor: El momento en que se ponen a cantar.

@Chackson5

Quizás sea una película que merezca más puntuación de la que le he otorgado, pero a pesar de ser una conmovedora historia sobre una lucha contra el cancer de un niño y las desavenencias, altos y bajos por las que pasa esta joven pareja, no hay que olvidarse que es una historia por las que estan pasando cientos de familias en el mundo que se tomarán este tema mejor o peor que ellos. Estamos hablando de cine, de un guión correcto, una dirección y fotografía correcta de libro que no puede fallar. la película no entabla riesgos de guión aún siendo una película autobiográfica, que sencillamente se dedia a contar lo que les pasó con un final feliz. Se agradece que no caiga en sentimentalismos dramáticos gratuitos y estoy seguro que si miramos a nuestro alrededor, conocemos y nos cruzamos con muchas personas que tienen o han tenido un problema similar merecedores de una película, con la diferencia, en que a ésta pareja se les ocurrió compartir su experiencia con nosotros en un libro, experiencia que no les hace más dignos que las personas anónimas que deciden no hacer tal cosa. Una experiencia como miles hay en el mundo de forma anónima.

Interesante y entretenida obra cuya virtud está en la forma de plantear un drama cuyo tema es inherentemente crudo, deprimente y denso, en un tono ameno, sin ser demasiado superficial ni caer en lo naif pero sí llevando la trama de una forma digerible, auténtica y humana, que a pesar de algunos momentos algo fuera de tono que pretenden buscar la sonrisa pero sin caer en lo cómico, y otro quizá algo exagerado, no pierde realismo. Tampoco cae en el sentimentalismo ni en el moralismo, situaciones recurrentes en este tipo de historias. En general tiene buen ritmo aunque hay momentos flojos de intensidad. Vale la pena pero a pesar de sus virtudes, creo que no alcanza a ser una película sobresaliente.