United 93 (Vuelo 93)

Varias personas me recomendaron en su día ver esta película. Recuerdo que no me apetecía verla, porque después de la mala experiencia que tuve con "World Trade Center", no quería ver otra película sobre los hechos del 11-S.
Al año de su estreno aproximadamente decidí verla, y el mayor recuerdo que tengo es mi sudor. Nunca pensé que una película me produciría tal sensación de agobio que hiciera que sudara y me pusiera al filo del asiento. Después de verla varias veces más y con el paso del tiempo, sigo comprobando que la sensación que me prudece es bastante similar a la original.
No sé porque tengo esta reacción con la película, pero cada vez que veo el DVD en mi casa, algo se me revuelve en el estómago. Pero algún punto masoquista que tengo hace que de vez en cuando ponga la el DVD y las sensaciones me inunden.
Reconozco que es una película que se disfruta desde el principio hasta ese final que uno conoce, pero también se pasa mal. Uno sufre junto a esos personajes (interpretados por actores desconocidos para que uno como espectador no se identifique con ninguno) debido a que lo que se dice es real. El guión en casi su totalidad está hecho con las grabaciones que se extrajeron. Uno observa impasible como esa irrealidad fue real. Uno lanza un grito silencioso de desesperación para que ese avión no despegue, o de que en esta ocasión sí puedan conseguir los pasajeros el control de ese ataúd que les lleva directos a su final.
En fin, película tremendamente impactante que no creo que deje indiferente a nadie. Uno sufrirá con todos los personajes y observará con el corazón sobrecogido el destino que marcó ese despegue a los pasajeros. Uno sufrirá durante todo el metraje, y al final uno sentirá ganas de gritar con tal de que exista una salvación, olvidando inconscientemente ese final más que conocido por todos.

Impactante película, que es capaz de ponerte la piel de gallina desde el primer minuto, crea una atmósfera de tensión y de intriga que llegará a estresarte aun sabiendo el final fatídico del film, es una recreación quiza insuperable, un claro reflejo de lo que pudieron sentir los pasajeros del vuelo united 93, la impotencia, rabia, lástima, pena, todas estas sensaciones nos volveran a invadir nuestro pensamiento tras ver esta magnífica película.
Poco a poco va aumentando la tensión hasta los minutos finales, donde todo el mundo sabe como va acabar pero deseamos que hubiése sido de otra forma.

Indispensable película.

Pero, ¿no podrían habérselo imaginado? Quiero decir que... teniendo bases militares en todos los países del mundo y usando a estos como teatro de guerra, el gran Coloso Americano tendría que haber estado en guardia ante la posibilidad de que su propio país pudiera convertirse, alguna vez, y por revancha, en teatro de guerra también.
Con un esquema narrativo polifónico de sobrecogedor realismo, esta película nos muestra lo que pudo hacerse y NO se hizo en el 11-S. Nos muestra la impotencia de unos militares de altísimo rango y el valor que es capaz de sacar adelante el animal humano cuando quiere vivir. Me encantó la película. Pero creo que deberíamos sacar partido, también, del sutil comentario que hace su director al explicar el film. Cuando llega a la toma final, en que víctimas y victimarios llegan al extremo de la violencia, Greengrass manifiesta en off: "Esta es la parte en que estamos todos ahora". Para pensárselo.

El 11 de septiembre de 2001 tuvo lugar un terrible acto terrorista a gran escala que conmocionó a todas las pobres almas que apenas daban la bienvenida al siglo XXI.
Cuatro aviones fueron secuestrados. Los terroristas estrellaron dos de ellos contra las Torres Gemelas, situadas en un lugar desde entonces conocido como la Zona Cero. El tercero impactó contra la Casa Blanca; y el destino del cuarto prácticamente era un misterio para el público general. Decíase que unos cazas americanos lo habían derribado. Parece ser que lo cierto es que los pasajeros se rebelaron contra sus secuestradores, y consiguieron estellarse en campo abierto. Este era el United 93, y la experiencia de los pasajeros –y de la torre de control- se trata de recrear en este trabajo audiovisual.

El director responsable de esto, Paul Greengrass sabe dirigir buenas escenas de acción, pero ponle a 2 personas hablando en un café y la cabeza te dará vueltas. ¡Estúpido abuso de la cámara en mano, cómo lo odio! ¡Convierte a potencialmente buenas películas en experiencias mareantes, casi insoportables!

Hay que decir que los últimos 20 minutos de United 93 son muy buenos, porque son los únicos minutos centrados en el United 93. El resto es casi infumable a no ser que seas un controlador aéreo.

Los actos terroristas del 11 de septiembre han dado ya para varias interpretaciones cinematográficas, incluyendo una superproducción de estudio protagonizada por Nicolas Cage.
Pero la versión audiovisual definitiva que recomiendo encarecidamente es un increíble documental firmado por dos hermanos que trataban de hacer un reportaje sobre el cuerpo de bomberos de Nueva York, y se encontraron en medio de la catástrofe. ¿Alguien conoce el título de dicho documental? Lo tengo que volver a ver…

Con esta película ves de primera mano lo que sucedía aquella mañana del fatídico 11 de Septiembre. Lo muestra desde todos los enfoques y bajo un prisma que no se adopta patriótico, solamente humano.

La manera de mostrar a los islamistas es, desde mi punto de vista, apropiada (quizá no la más apropiada ), ya que se aprecian ciertos rasgos personales de ellos, distando bastante de la usual visión plana - radical de los asesinos suicidadas.
Los actores, al ser desconocidos, otorgan mayor veracidad a este filme, casi documental, de Greengrass (autor que habrá que seguir muy de cerca).

El seguimiento de los controladores aéreos y de los militares es ejemplar, la forma de visualizar los atentados por los medios, también. Estamos ante el 11 de septiembre otra vez.

Y lo cierto es que, aunque el espectador conozca el final, la película rezuma tensión por los cuatro costados...y no tiene otro remedio que asistir sorprendido al deselance, que se desarolla de forma vertiginosa, (previa emotividad con las llamadas finales), de la mano de un notable acompañamiento musical.

Fundido en negro. Quizá la mejor película del año.