Megan Is Missing

Justo en la época en la que el mockumentary comenzaba a instaurar toda una retahíla de productos imperados por el éxito de "Paranormal Activity" (2007), llegaba en el año 2011 una propuesta que mostraba la tragedia de una joven desaparecida pero narrada desde el punto de vista de una serie de charlas bajo webcam, todo montado en base a unos cortos de vídeo que inevitablemente nos llevará a degustar la cinta bajo las formas del found footage. Y, realmente, aunque el director Michael Goi no acaba de exprimir el aspecto más tenebroso del meta-realismo del subgénero, sí que acierta en no dejarse llevar por su artificio, logrando un film de un poso bastante gélido que confabulará al espectador a degustar la tragedia contada de manera ciertamente incómoda.

El film sorprende en su tercio final, ejemplarmente suministrado, donde el director plantea un giro de estética con cierta turbación y una catarsis con una potencia escénica muy destacable, que hace lamentar las desigualdades narrativas de la película en un cambio de rumbo que parece solo engranarse a medias. Lamentablemente, "Megan is is missing" quedará menguada por un núcleo central algo aburrido y por su más que evidente muestra de moralina sobre su temática principal, que hace obviar hacia el espectador los coqueteos subversivos que esporádicamente parece tener para/con su formato. Destacar, eso sí, la naturalidad interpretativa de la pareja de chicas protagonista, que ayudarán a disfrutar las maneras que imperan en el film.

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Título que se enmarca en el tema de desapariciones de adolescentes en los USA. Megan es una chica promíscua que chatea constantemente con su virginal amiga Amy. Hasta que se le cruza un tal Josh en su camino. Los peligros de conocer gente por internet cuando tienes ganas de evadirte.

La primera hora es casi toda dedicada a mostrar el mundo en que se mueve la adolescente Megan: sexo, drogas y mucho desparrame. Hogar desestructurado, sí, pero ¿ningún padre sabe lo que se cuece con sus hijos? El rollete adolescente se hace algo tedioso, y solo cuando aparece Josh la cosa cobra algo de interés, pero sin pasarse. Luego se convierte en un remedo de programa de desapariciones, se percibe que se cuece algo pero sin terminar de cuajar.

La chicha se la guardan para el último tercio, poca pero intensa, muy retorcida y malrrollera. Emplean más tiempo en mostrar el insufrible mundo de Megan que en extenderse cuando las cosas se ponen feas, y esa es su mayor pega. Ah, y todo es visto a través de vídeo cámara o cámara de chat, muy en boga hace unos años pero ya es un recurso que cansa.

Hace mucho que no me tomo la molestia de escribir una crítica y tampoco es que le vaya a dedicar mucho tiempo a esta "película" pero me siento en la obligación moral de decir lo siguiente y en mayúsculas: ES UNA BASURA.

Me gustan las producciones arriesgadas y de hecho he disfrutado hasta cierto punto de películas como "The Blair Witch Project", "Open Water", "Paranormal Activity"... películas que comparadas con esta son auténticas obras maestras.

Ya empezando desde el principio, la sucesión de hechos ilógicos y pésimamente actuados no hacen que en ningún momento la película convenza ni que acabe de arrancar. Hay situaciones reflejadas en la película por "actrices" que rozan la vergüenza ajena.
Es morbosa y exagerada y de un pésimo gusto.

Una fallida producción que busca el morbo barato de "Serbian Film" usando el estilo de falso documental del "Proyecto de la Bruja de Blair" y francamente mal hecho.

"Megan is missing" es una producción que en vez de premios debería recibir una denuncia colectiva y fustigar al director en una plaza pública por plantarnos semejante basura.

Este es uno de los mejores falsos documentales que se han grabado nunca, una joya del género que parte del retrato de dos amigas adolescentes -una tímida y noble, la otra "descocada"- y de su entorno para introducir, en ellas, el desgarro, la sordidez de la parte más cruda de la vida, aquella parte que generalmente sólo leemos en los periódicos.

No es cierto, como se ha dicho en otras críticas, que los personajes y situaciones estén estereotipados. Quienes dicen esto quizá no saben que sí hay una juventud vacía y aburrida que se entrega al exceso como forma de sentir que está haciendo algo. Y esto no solo lo digo yo, lo dicen también Easton Ellis en sus novelas y Larry Clark en sus películas, entre otros muchos. La película retrata perfectamente este mundo, el contraste entre una joven sin referentes familiares pero consciente de la mierda que la rodea, y otra que vive -Dios, ¡es adorable!- rodeada de cariño y de atención y que, quizá por eso, se queda al margen, totalmente valorada por su amiga, que sabe que ella es una de las pocas cosas que valen la pena.

Y aquí explota la realidad, la vida en su cara más fea. No percibo en ninguna parte ni moralina ni morbo gratuito, al contrario, pienso que todos los recursos están enfocados a transmitir esa visión de la realidad como ente amorfo, aleatorio, que puede aplastar de un giro los deseos e ilusiones de cualquier espíritu limpio. Hay escenas que se quedarán grabadas en la retina durante mucho tiempo, que nos harán, después del impacto (aviso: fuerte impacto), profundizar en lo que hemos sentido, en lo que esta película nos ha transmitido. A fin de cuentas, totalmente inspirada por otro clásico: aquella película holandesa, "Desaparecida".

Sin duda alguna, una futura obra de culto y de referencia.

La película no es mala, pero se nota a leguas que es de un director novato y actuaciones de novatos, a Michael Goi se le ve talento en el género del terror(?), pero tiene muchos errores, igual que la película, muchos detalles que son poco creíbles, tiene detalles parecidos a Paranormal activity, por la cámara, pero Paranormal activity tiene algo que no tiene esta película, ella jamás intenta venderse, solo intenta parecer real, sin importar que la película pierda mucho por esto, en cambio esta película pierde mucho de realidad vendiéndonos la historia, trata de vendernos realidad por ser basada en hechos reales, para es muy manipulada y a veces poco creíble. Con respecto a las actuaciones la de Amy (Amber Perkins) por lejos la mejor, Megan (Rachel Quinn) a mi parecer bastante pobre, en fin, la película entretiene y tiene toques muy buenos, pero falta mucho para destacar en el género del terror o el género del thriller, ya que nunca se terminó de definir, ahí su gran error, no poder convencer.