Sonic, la película

He aquí un fanático de Sonic desde que en 1991 jugué a Sonic The Hedgehog de Megadrive. Por lo tanto, esta no es una crítica objetiva. Algunos dirán que es infantil, que es humor noventero y trasnochado, que la historia no es gran cosa, que simplemente está ''bien'' o es ''correcta''. Pero los que hemos pasado muchas horas recogiendo anillos, saltando muelles, recolectando esmeraldas y haciendo loopings sabemos que esta película es todo un regalo.

Después de aquella birria de trailer de hace un año, el resultado final no puede ser más satisfactorio. Sonic La Película es un entretenimiento honesto, familiar, con buenos efectos especiales y un humor blanco que no molesta a nadie. Hay guiños a los fans por todas partes, desde la música, los decorados, los chistes, o las persecuciones y batallas. La animación es genial y el esfuerzo por la mejora del personaje ha debido ser titánico. Hay escenas muy simples, sí, y luego hay escenas magníficas.

Y por supuesto Jim Carrey como Robotnik, un gigante de la comedia que con sus muecas hace suyo el personaje para siempre. Está mejor que nunca y no podría imaginar a otro actor interpretando a este villano. Es el actor, quien la convierte en la mejor adaptación de un videojuego al cine hasta la fecha, en opinión de un fan poco objetivo.

Para los que hemos crecido entre videoconsolas de SEGA, esta es nuestra película. Y a tenor de los buenos resultados en taquilla que está cosechando y las declaraciones del propio Carrey, todo apunta a una secuela. ¡Cuento los días para Sonic 2!

UN PAR DE COSILLAS EN SPOILERS:

Cada vez que se anuncia una película basada en un videojuego aparece el típico comentario de “va a ser mala”. Sería lícito preguntar por qué existe esta tendencia, pero es un esfuerzo en vano porque la respuesta siempre es la misma: “será mala porque todas lo han sido”. Ante semejante argumentación es mejor aceptar la derrota. No es nuestra guerra. Son iluminados bendecidos con el don de pronosticar la calidad de un proyecto cinematográfico sin necesidad de conocer la primera sinopsis. Su verdad es incuestionable. Sin embargo, queridas pitonisas, en esta ocasión habéis fallado, “Sonic, la película” ha conseguido escapar de vuestros oscuros augurios y nos ha regalado una de las adaptaciones más disfrutables. Aunque reconozco que el camino hasta llegar aquí no ha estado libre de vericuetos. Hagamos un poco de memoria.

Crisis de fe
Todos recordaremos la aberración de la naturaleza que fue el primer diseño de Sonic para la película. Esa criatura se coló en las pesadillas de los adultos que habían crecido con el erizo más rápido de los videojuegos. Hay quien dice que todo fue una estrategia de marketing para vender la película por medio de la polémica, yo digo que fue el acto más cercano a practicar el harakiri. La esperanza de vida de ese diseño estaba respaldada por los memes que inundaron las redes sociales, pero estaba claro que no era la intención original de los integrantes del proyecto. Se habían equivocado. Ante semejante avalancha de críticas destructivas surgió el plan de contención: rediseñar a Sonic para hacerlo más próximo al canon concebido por el ideal popular. Habían escuchado a la gente y ahora les tocaba trabajar a contrarreloj para hacer los cambios oportunos. Meses después supimos que la cruzada había merecido la pena.

Y al tercer día resucitó
Las críticas cesaron y la gente empezó a interesarse por la película de forma sana. Ese fue el premio que recibieron los animadores y diseñadores. ¿Hay algo más a parte de contentar a los seguidores? Por supuesto, una producción de corte familiar que es muy sincera con su oferta. Conocedora de todas sus virtudes y carencias, pero que invierte muchos esfuerzos en disimular lo segundo.

Una trama genérica impulsada por la amistad en la que tocará escapar de la amenaza de turno. Priman las aventuras y las escenas de acción de persecución para aprovechar el potencial de un personaje apodado por España como “el prisas”. Todo ello entrelazado con un humor que deja poco respiro, pero que, en general, funciona. Como punto de partida es sólido y se nota que no han querido correr muchos riesgos en el guion por miedo al rechazo del público. Si hacen una secuela, sí tocará aportar más frescura e innovación.

Y puestos a resucitar, le voy a estar eternamente agradecido a esta película por habernos regalado el regreso de Jim Carrey en un papel pasado de frenada. Cada vez que aparece en escena es imposible no sentir cierta dicha de volver a verle así. Su interpretación desprende la misma energía que un niño en una piscina de bolas. Es Jim Carrey en toda su esencia. Sonic puede que se convierta durante una temporada en el nuevo personaje favorito de los niños. Lleno de carisma y actualizado a los tiempos modernos. Es una versión muy entrañable con la que es difícil no simpatizar. James Marsden está bastante simpático como el héroe humilde que todo vecindario quiere y forma una buena dupla con Sonic.

Diría que el mejor piropo que le puedo hacer es que si hubiese visto esta película de niño, habría flipado. Hubiese quemado su VHS y habría hecho más ejercicio al intentar correr tan rápido como Sonic. Por cierto, estad atentos porque está plagada de guiños y referencias a otras franquicias.

Los más pequeños y los nostálgicos se lo van a pasar muy bien, mientras que los adultos que desconocen a este personaje encontrarán suficientes motivos para que su duración no sea una condena lenta y dolorosa. Así que podéis ir sin miedo al cine porque es todo lo que “Detective Pikachu” tendría que haber sido. ¡Qué demonios, será una de las sorpresas más simpáticas del año!

*A la carrera

Después de los cambios digitales del diseño de Sonic La película tras el tráiler inicial, nos encontramos con un protagonista que, unido a la historia y los diferentes detalles de esta, hace honor a los videojuegos de los que procede, reflejándolos con bastante corrección.

Jeff Fowler, en su primera dirección de un largometraje, consigue encauzar una trama sencilla y genuina con flashes de las características originales de la saga. Empezando por los efectos visuales y recreación de los distintos mundos, y terminando por la carga cómica y agradable del guion, propone una cinta que especialmente hará las delicias de los niños, así como, quizá en menor medida por su tono superficial, de los adultos. Su punto fuerte reside en el humor centrado en la cultura pop y el atractivo y la química de sus protagonistas.

Por otro lado, podría haber escogido una atmósfera que se alejara de la infantilidad en ciertas escenas en las que las bromas encajan de forma un tanto forzada o momentos que pierden ritmo e interés.

*El casting

El reparto está bien escogido y todos hacen un trabajo decente dentro de sus papeles, aunque estos sean pequeños. Ben Schwartz le aporta la dulzura y la calidez necesarias a la voz del erizo, de ese modo es posible conectar con sus emociones y que lidere la película. James Marsden también se convierte en un compañero ideal, fiel y asegurador de carcajadas. Y Jim Carrey devora los minutos en pantalla de Robotnik con una excentricidad, un egocentrismo y una maldad que son hilarantes, sacando las mejores risas de la cinta gracias a un Eggman que han logrado colorear más allá de su simpleza.

*Conclusión

Sonic La película es puro entretenimiento para toda la familia. Una nueva partida, esta vez en nuestra tierra, con la que pasar un buen rato y recordar (o conocer) al corredor de élite por excelencia. Un film que probablemente sea olvidable para los espectadores intrigados por la profundidad y la complejidad de los personajes, pero que cumple con su cometido de dejar una sonrisa al inicio de los créditos.

Escrito por María Iglesias

Tampoco es que esperaba algo majestuoso y como bien dicen "si no le pides peras al olmo" de seguro encantará a quienes puedan ver esta simpática adaptación de uno de los icónicos juegos de SEGA, con el que muchos crecimos jugando en nuestra niñez y juventud.

Y es que posiblemente "Sonic: La Película" se haya convertido en uno de esos proyectos basados en videojuegos, que ha encontrado el equilibrio casi perfecto al ser trasladado a la gran pantalla y por fin ha logrado algo que muchas productoras de manera literal, "matarían" por conseguir, y eso es ser un producto entretenido que conecta con todo el publico, respetando los orígenes de su premisa e incluso dándose el lujo de explotar la posibilidad de todo su universo, pero de una manera sutil y hasta hermosa.

A pesar de que el primer "trailer" horrorizó a millones por el "tosco" y feo diseño del personaje, lo que pre-suponía un desastre a gran escala y un nuevo fracaso a nivel de taquilla, la productora Paramount, decidió hacer algo bastante inusual para rescatar esta película y eso es escuchar (de verdad y con respeto) los comentarios y sugerencias de la gente (en especial de los fanáticos del videojuego) y lo mejor de todo les ha prestado atención en serio (tanto así que hasta se creo un comité de decisiones en ese apartado) y en conjunto han podido sacar adelante este entretenido film, que puedo garantizar, no es el desastre que muchos (me incluyo) anticipábamos.

Del reparto hay que hacer un punto y parte y empezar con el regreso a casa (y por la puerta grande) del eterno Jim Carrey, de ese gran cómico, cuya sola presencia ya nos tenia garantizado al menos en sus apariciones un grato momento de diversión, y si debo, de decir que el "viejo" Jim no nos defrauda. Le acompañan James Marsden, Neal McDonough, Tika Sumpter, Lee Majdoub y Natasha Rothwell entre los mas destacados, además de la agradable voz de Ben Schwartz, poniendo voz al mitico "erizo azul".

Entre con las expectativas por los suelos y he salido con una sonrisa en el rostro, al igual que el resto de los espectadores y eso, no es muy común de ver últimamente. Y si a eso le sumamos las dos escenas post-créditos que son de verdad emocionantes y bien hechas. Eso si se llama crear un "universo" con sutileza y elegancia.

Así si.

El cine de videojuegos es un género en si mismo, caracterizado por su gran cantidad de bazofias; aquellos personajes que brillan en las consolas pierden su magia en la gran pantalla protagonizando cintas vomitivas (Street Fighter, Mortal Kombat, Double Dragon, las películas de Uwe Boll, Super Mario...). Cuando se anunció que el erizo azul de SEGA tendría una adaptación a la gran pantalla, nos temimos lo peor, especialmente al ver ese horrible diseño que luciría originalmente; tras un rediseño seguido de un retraso del estreno de la película, "Sonic, la película" llega a los cines resultando ser una grata sorpresa, un producto solvente y una gran adaptación videojuegil.

Sonic (Ben Schwartz) lleva años oculto en la Tierra, pero tras provocar accidentalmente un apagón en toda Estados Unidos, es descubierto y considerado un enemigo del estado; el Doctor Robotnik (Jim Carrey) será el encargado de capturarle y usar sus poderes a su favor. Por suerte, Sonic no está solo ya que contará con la ayuda de Tom (James Marsden) un policía humano que ayudará al erizo a escapar de Robotnik.

Sonic es el protagonista absoluto llenando todas sus escenas de diversión a raudales, ternura, carisma y energía; James Marsden se lo pasa en grande ayudando al erizo, aunque es el más flojo de los protagonistas;, Jim Carrey recupera su típico personaje de los 90 (Histriónico, hilarante y pasado de rosca) con Robotnik, y lo hace genial. La película es perfecta para los chavales, divertida, enérgica y llena de carisma y ternura. No ofrece nada innovador, presentando una historia mil veces vista, sin embargo, no aburre en ningún momento e incluso logra alguna risa del público adulto. Los efectos especiales están bien (Sonic ya no da miedo), presenta algún momento muy chulo (Los "tiempo bala" me encantan) y un protagonista genial.

En resumén, un mero entretenimiento divertido y enérgico que no pasará a la historia como la mejor película de la historia, pero si como la mejor adaptación de un videojuego al cine. GOTTA GO FAST!!!